Durante el último tiempo, las distintas industrias que operan con maquinaria y equipos pesados, como la construcción, la minería y la agricultura, han fijado la vista en el trabajo con sensores capaces de reportar diversos indicadores de procesos automatizados de manera remota. Nos referimos a la telemetría.

Con base en la tecnología GPS, la telemetría permite extraer datos de un dispositivo de forma remota. Gracias a esto, es posible conocer la ubicación exacta, las horas de uso y hasta la temperatura del aceite de un camión autónomo.

Ariel Vaisman, CEO y Co-fundador de RendaloMaq, startup dedicada a la gestión inteligente de arriendo de maquinaria, explicó que “según sus distintas aplicaciones, la profundidad y precisión con que los sensores son capaces de entregar información, entregan la posibilidad de analizar en tiempo real si una máquina está en uso, cuánto tiempo lleva operando, bajo qué condiciones, o si presenta algún desperfecto para poder prevenir una falla”.

RendaloMaq actualmente incorpora dispositivos de telemetría en los equipos que comercializa, con lo que prometen mejorar la productividad de las operaciones a través del ahorro de tiempo, costos y mayor seguridad para los trabajadores.

“Usualmente, para conocer el estado de una máquina se debía llamar al operario en terreno para que personalmente revisara indicadores como los filtros de aire o la presión de los neumáticos, por ejemplo, para que luego enviara la información de vuelta y sirviera de insumo para la toma de decisiones. Hoy, mediante la telemetría, podemos tener en línea toda la data de forma instantánea, haciendo mucho más eficiente la gestión y aumentando la productividad”, comentó Ariel Vaisman.

Los sensores en las máquinas están enviando constantemente datos de temperatura, revoluciones por minuto, horas de uso, entre otras mediciones que se reportan en tiempo real al operador remoto, que a su vez puede optimizar sus tareas y reducir riesgos.

De igual forma, el manejo autónomo de maquinaria robotizada podría incluso aportar a la sostenibilidad de distintos sectores, incluyendo la construcción, la minería y la agricultura, al hacer más eficiente el consumo de energía y combustibles fósiles.