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Uno de los problemas que atentan contra el funcionamiento del transporte de carga en Chile, ligado al comercio exterior como al doméstico, es el déficit de camiones operativos y de conductores. Así lo confirman diversos actores del sector de la logística, entre ellos, navieras y operadores, así como empresas de transporte y también gremios de camioneros, quienes aseguran que el déficit alcanza a 10.000 conductores para diversas labores dentro del movimiento de carga, reportó El Mercurio.
Este problema se da a raíz de diversos motivos, entre ellos, el agotamiento y disconformidad de algunos choferes por los protocolos sanitarios ligados a la pandemia, lo que ha generado mayor lentitud en las operaciones y pérdida de turnos. Por ejemplo, explican que los puertos no están trabajando con un tercer turno – en la noche-, por lo que el negocio para el transportista es menos rentable y más complejo por los atochamientos en los otros dos bloques diurnos.
Otro factor relevante es el constante temor a algún atentado -especialmente en viajes en el sur del país- o asalto en las carreteras o en la ciudad. Es por ello, que muchos conductores han optado por buscar oportunidades en industrias con mejores estándares de seguridad e ingresos, como la minería.Sin embargo, también surgió otro fenómeno, que es la migración de conductores de camiones de carretera a labores en apps de transporte de personas o trabajos independientes de reparto de última milla ligado al e-commerce, donde pueden igualar o incluso superar los ingresos que lograban en el movimiento en camiones.
En el sector señalan que un camionero en áreas como la minería, forestal o industrias especializadas, puede ganar entre CLP 1,2 millones y CLP 1,5 millones, en tanto, en reparto urbano CLP 800 mil.Junto con advertir un déficit en el stock de camiones nuevos, Juan Araya, Presidente de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones de Chile (CNDC), comenta que "el movimiento de carga ha sido feroz en los últimos meses, no hemos parado aún faltando 10 mil choferes”. Asimismo, Araya recuerda que en 2019 los gremios estuvieron impulsando en conjunto con el Ministerio de Trabajo, cursos para que personas obtuvieran licencias de conducir para transporte de carga, pero ese plan “nunca se completó”, dijo.
En tanto, Mauricio Perrot, Presidente de Chile Transporte – y Gerente General de Empresas Perrot- señala que la eliminación del tercer turno en los puertos afecta al 25% de la facturación mensual de los transportistas. “Además, en los terminales de contenedores hay gente que ha estado contagiada de Covid-19 y que, por ende, las labores que antes demoraban dos horas ahora tardan cinco. Tenemos menos vueltas y el conductor, como sabe que estará en un taco, se va a trabajar a última milla u otros sectores”.
Roberto Urenda, Gerente de Recursos Humanos de Sotraser – firma del grupo Bethia -, también alude a los problemas de entrega de camiones nuevos por parte de los fabricantes debido a la pandemia, particularmente Brasil, desde donde proviene parte relevante de las unidades que se comercializan en Chile.Sobre los choferes, Urenda señala que "hace varios años que la industria viene dando claras señales de la baja cantidad de jóvenes que optan por la formación como conductores profesionales. Esto, sumado a la realidad actual, con asaltos, altos niveles de ausentismo derivados de licencias médicas en esta pandemia, han generado un escenario crítico. Con las proyecciones de crecimiento para nuestro país, sin duda que las variables de escasez de camiones y conductores son críticas y preocupantes".
Sergio Pérez, Presidente de la Confederación Nacional del Transporte de Carga de Chile (CNTC), comentó que "uno de los problemas es que la labor del conductor profesional en carreteras es de corto tiempo. Alguien de 30 años que lleva cinco años en este rubro le dirá que quiere estar solo un tiempo más".
Fuente: Mundo Marítimo.
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