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Una de las consecuencias que ha traído el COVID-19 ha sido la disminución o suspensión de la actividad de un porcentaje significativo de empresas, especialmente en algunos rubros, lo que ha provocado la pérdida de muchos puestos de trabajo.
De acuerdo a un estudio realizado por la CCSS, cerca del 80% de las compañías de la Región Metropolitana ha experimentado una caída en sus ventas desde la llegada de la crisis del Coronavirus en Chile y, en promedio, un 38% de las firmas ha debido cerrar oficinas, siendo el comercio minorista uno de los más afectados.
Por su parte, el sector Construcción también enfrenta un difícil momento, especialmente desde que se decretara cuarentena total para 7 comunas de la Región Metropolitana, las que, en su totalidad, representan cerca del 50% de los proyectos de edificación vigentes en el Gran Santiago, involucrando entre 130 mil y 150 mil trabajadores; sumado a la situación que enfrenta el turismo, el ocio y la aeronáutica. En este aspecto, a nivel general la tasa de desocupación nacional fue 7,8% en el trimestre móvil diciembre-febrero 2020, incrementándose 0,8 puntos porcentuales en 12 meses ; no obstante, es un resultado que aún no grafica los efectos en el empleo que va a generar la emergencia sanitaria.
Al respecto, Francisco Torres, Director de Staffing & Outsourcing de la consultora de RRHH Randstad, señaló que si bien estamos frente a un escenario complejo, “muchas veces de las crisis podemos sacar los mejores aprendizajes y, por ende, aprovechar aquellas oportunidades que otras veces hemos visto pasar por el lado”.
Así, el ejecutivo enfatizó que este es un buen instante para que las personas que han visto suspendidas sus actividades o han quedado sin trabajo no se desanimen durante este período y se mantengan activas, porque el mercado laboral está en constante evolución y hay sectores que hoy están requiriendo llenar plazas.
Entre los sectores que están demandando más fuerza laboral, figura la industria logística, que también requiere incluir en sus filas a bastantes trabajadores, debido a que “las cadenas de suministro están atravesando un peak de producción para proveer de artículos de primera necesidad a todos los rubros que los demandan; además de correos y encomiendas, que son departamentos en los cuáles estamos observando volúmenes similares a los de un black friday por la gran cantidad de cajas que se están enviando”, señaló.
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