Revestimiento de piso, producto cementicio elastomérico. Foto: Meeting Point Asociación de Decoradores.

El mercado de productos para revestimientos de pisos y muros, tanto para interior como exterior, es muy extenso y variado, existiendo una completa gama de opciones para cada tipo de proyecto, ya sea residencial, comercial, industrial o de espacio público.

Al momento de seleccionar un determinado revestimiento, debe considerarse si estará expuesto al exterior o interior, donde agentes como polvo, rayos UV, humedad y muchos otros factores del entorno, afectan el material. También hay que tener en cuenta la intensidad de uso que tendrá la superficie, el tipo de carga a la que será sometida o la abrasión. La variedad de soluciones es amplia y dependerá del uso en particular, según sea el caso.

“Las tendencias están optando por productos que puedan ser de origen reciclado y natural, tales como piedra, bambú, maderas, y la aplicación de texturas, entre otros. No obstante, los clásicos revestimientos tipo cerámicas o porcelanatos están siempre vigentes, ya que sus prestaciones son muy adecuadas para zonas y áreas húmedas que requieren facilidad de lavado y limpieza”, destaca Pablo Flores Salazar, académico de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Paisaje de la Universidad Central.

Para los expertos, en general el proyecto es el que genera necesidades de acuerdo a su uso y los materiales tendrán que ir en la línea de cumplir esa función particular. En el caso de los revestimientos, por ejemplo, “si se trata de un restorán, la respuesta en cuanto a materiales debiera ir orientada a resolver en primera instancia la cocina, que es el lugar más importante. Este debe ser limpio, de fácil limpieza y funcional, para lo cual puede usarse acero inoxidable, cerámicas o porcelanatos, fundamentalmente. En cambio, en el área del comedor la tendencia será buscar materiales acordes a la impronta del restorán y el tipo de oferta gastronómica”, comenta Pablo Flores.

Casa Bovio. Revestimiento de piso mármol travertino. Revestimiento de muro piedra de cantera. Foto: Arquitecto José Pedro Vicente.

Higiene, resistencia, imagen, rectificación de obra gruesa e impermeabilización, son algunas de las misiones que deben enfrentar los revestimientos. En este sentido, el arquitecto José Pedro Vicente comenta que en lo que respecta a rectificación de la obra gruesa, existen los autonivelantes que consiguen una perfecta horizontal antes del proceso de acabado. En el caso de los productos naturales, en tanto, existe, entre otros, la madera, criticada por un alto porcentaje de deformación, principalmente en zonas con variables de humedad y exposición al sol, razón por la cual es importante su tratamiento”.

Para José Pedro Vicente, cada día influye con mayor fuerza la funcionalidad por sobre lo estético, por lo que el mercado habitacional debe considerar pisos de fácil limpieza. Complementario a esto, existen familias que deciden quedarse en comunas céntricas y no escapar a las urbanizaciones que ofertan en la periferia, originándose el reciclaje de viviendas antiguas.

“Para ambos casos existe un producto que consiste en un micro cemento aplicable sobre el radier en el caso de obras nuevas, o bien, sobre pisos existentes en remodelaciones, evitando de esta manera tener que levantar porcelanatos o cerámicos con todo el problema de los encuentros de niveles”, detalla el arquitecto. El resultado consiste en un acabado parejo e impermeable de alta resistencia al tráfico y uso doméstico exterior e interior. El diseño de esta opción es tan amplio como el pantone de colores en las pinturas, pudiendo dejar un acabado tipo hormigón hasta imitaciones de óxido.

Casa Olguín. Revestimiento de piso interior y exterior. Porcelanato previo trabajo de autonivelante. Se propone el mismo revestimiento en ambos recintos para fusionar los espacios. Foto: Arquitecto José Pedro Vicente.

En el caso de los revestimientos de muro, y cumpliendo con la OGUC en su artí- culo 4.1.10 referido a la Reglamentación Térmica, se debe proveer de adecuadas soluciones en pro de la habitabilidad de sus residentes. Para esto existen en el mercado principalmente dos productos.

“El primero consiste en una placa de yeso cartón a la cual se le adhiere -en fábrica y con un pegamento especial- un poliestireno expandido que consigue un revestimiento térmico para la cara interior del proyecto. Por su parte, el EIFS -Exterior Insulation and Finishing System- corresponde al mismo poliestireno expandido, en este caso, y como su nombre lo indica, se aplica en caras exteriores mediante morteros de alta adherencia tanto en tabiquerías como en muros sólidos perfectamente aplomados”, detalla José Pedro Vicente.

Posteriormente, mediante mallas y granos, se obtiene el look que le corresponde a cada proyecto, desde simulación de muros en adobe hasta estucos convencionales. Sus objetivos fundamentales no solo consisten en mejorar la calidad de vida -lo que va de la mano con menor contaminación y mejor salud- sino además, optimizar el consumo de combustibles.

Casa Olivari, en el Embalse Los Aromos, Limache. Revestimiento Exterior EIFS. Foto: Arquitecto José Pedro Vicente.

Una buena solución son los porcelanatos, debido a su baja absorción de agua, alta resistencia a la tracción y superficies antideslizantes. Una arcilla refinada, purificada, cocida a altas temperaturas y a mayor presión, consigue diseños que logran imitar maderas, cueros, latones oxidados hasta hormigones vistos entre un amplio menú de alternativas.

“De rápida aplicación, también logran rectificar las imperfecciones de la obra gruesa entregando nuevas nivelaciones y plomos en su resultado final. En síntesis, se tiene la capacidad de no hacer diferencias entre interiores y exteriores, o entre sectores secos y húmedos, lo cual, y desde el punto de vista de la arquitectura, ayuda a mimetizar y fusionar los espacios sin marcar diferencias”, complementa el arquitecto.

Otro revestimiento clásico es la pintura. “Existen diversos productos y técnicas de aplicación que dejan como resultado diversas superficies, ya sea texturadas, lisas, ponceadas, con grano y efectos como la técnica albayalde, envejecimiento entre otros”, concluye Pablo Flores, de la Universidad Central.