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El portacontenedores Halifax de Maersk fue reconvertido exitosamente en un buque de doble combustible capaz de operar con metanol, mediante una operación realizada en el astillero Zhoushan Xinya en China durante 88 días.
“Nos complace anunciar que el Halifax ha sido reacondicionado con éxito para convertirse en un buque de combustible dual que utiliza metanol. Tras la finalización de las pruebas en el mar, este portacontenedores ha vuelto a operar y ahora presta servicios a nuestros clientes en la ruta transpacífica”, indicó Leonardo Sonzio, director de Gestión de Flotas y Tecnología de Maersk.
MAN Energy Solutions estuvo a cargo de la conversión del motor, que junto con reemplazar piezas para que funcione con metanol incluyó la incorporación de nuevos tanques de combustible, una sala de preparación de combustible y un sistema de suministro de combustible.
Asimismo, el casco de la nave se tuvo que ampliar para dar cabida a los tanques de combustible. La eslora creció 15 metros, hasta los 368, aumentando así la capacidad del buque, que pasó de 15.000 a 15.690 TEU.
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