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En mesas de trabajo lideradas por el Mineduc, junto a la asesoría técnica de Fundación Chile, representantes de instituciones formativas, del sector productivo y de entidades gubernamentales abordaron las brechas en la implementación del Marco de Cualificaciones Técnico Profesional (MCTP) y reflexionaron y propusieron posibles soluciones que se debieran impulsar desde la Política Pública y/o la institucionalidad asociada a este instrumento, con la finalidad de mejorar la empleabilidad de las personas y dotar de técnicos calificados a los principales sectores productivos del país.
Marta Meza, jefa de división de educación superior técnico profesional del Ministerio de Educación, hizo referencia a la relevancia que adquiere el Marco de Cualificaciones TP y el valor que representa para las instituciones de educación TP y los sectores productivos, “por ello, este trabajo permitirá fortalecer su implementación y aumentar la colaboración entre todos los actores del sistema de formación técnico profesional. Esperamos ampliar el conocimiento y uso de este instrumento y generar mayor interacción entre el mundo formativo y el mundo laboral”.
Por más de una década se han desarrollado múltiples iniciativas que han permitido sentar las bases para un sistema nacional de cualificaciones; es así como en el año 2017 el Gobierno puso en marcha el primer Marco de Cualificaciones Técnico Profesional para mejorar la empleabilidad y productividad de los técnicos del país. Sin embargo, aún existen brechas que no han permitido avanzar a mayor velocidad en su instalación.
Manuel Farías, director de educación técnica y trayectorias formativo laborales de Fundación Chile, señaló que “por más de 20 años hemos trabajado potenciando el talento técnico, siendo actores activos en la creación de los primeros consejos sectoriales del país, así como del desarrollo e implementación del Marco de Cualificaciones TP. Hoy se requiere dar un salto para su consolidación, identificar las acciones que permitan cerrar las brechas y los vacíos en su implementación, y esperamos con el desarrollo de estas mesas de trabajo contribuir con un insumo para acelerar su instalación definitiva a nivel nacional”.
Los actores del ecosistema técnico profesional convocados analizaron las posibles causas de las brechas detectadas con la finalidad de proponer acciones y, de acuerdo a su potencial de impacto, priorizarlas según su viabilidad en el corto, mediano y largo plazo, y en base a ello poder construir una hoja de ruta que permita su instalación para aprovechar todos los beneficios que esta herramienta puede ofrecer a las personas y al desarrollo del país.
Durante su participación en las mesas de trabajo, Sergio Morales, rector del Centro de Formación Técnica San Agustín y consejero de Vertebral, señaló que la implementación del MCTP “nos ordena y nos convierte en instituciones que no solo prestan un servicio educativo, sino que también converge en que las credenciales (que no se tratan del título que obtienen, sino de las calificaciones que las personas dominan) tienen la capacidad de ser entendidas entre las distintas instituciones y, a su vez, por el sector empresarial. Ahí hay un divorcio histórico donde las cualificaciones que tenemos no alcanzan a recoger la velocidad de los cambios de las industrias líderes y de los sectores económicos que el país quiere potenciar y, por lo tanto, el marco le da un valor”.
Alejandra Hidalgo, encargada de capital humano del Ministerio de Energía, destacó la importancia de este instrumento señalando que “estamos interesados en seguir implementando y seguir poblándolo porque sabemos el valor que tiene para el mundo laboral el sector formativo y para las personas. Estamos muy contentos porque es un instrumento que se está usando”. En esta misma línea, anunció que “ahora vamos por un segundo poblamiento durante el próximo semestre que va a incorporar hidrógeno verde y otros subsectores importantes para energía”.
En tanto, para la jefa de entrenamiento de SAAM Terminals, Paola Ibáñez, es clave el rol de las empresas en este proceso ya que “pueden aportar desde su experiencia y conocimiento, proporcionando información actualizada sobre las necesidades del mercado laboral para que las instituciones formativas puedan alinearse a estas nuevas demandas y formar a los estudiantes en las habilidades y competencias necesarias para su inserción laboral”.
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