• Mejorar las competencias del personal

Los conductores, los peonetas y el personal de apoyo a la gestión del transporte no tienen, en general, un entrenamiento sistemático. Temas como la seguridad y prevención de riesgos, la calidad de servicio y el mantenimiento deberían ser parte de un programa regular de formación de personal de transporte, incluyendo por cierto el tema ético. La certificación de competencias del personal de transporte de carga es un desafío pendiente.

• Estandarizar

El transporte de carga necesita mejorar los estándares existentes y generar otros nuevos, para las dimensiones de los vehículos, los pesos por eje y otros temas técnicos afines. Junto con ello, para las actividades que involucra el transporte de carga se necesita estandarizar lenguaje y criterios, para facilitar las mediciones comparativas y el intercambio de buenas prácticas en esta industria. Con ello se puede generar un mejor entrenamiento para el personal y promover el mejoramiento continuo.

• Adoptar métodos de costeo y tarificación modernos

Cuando un transportista tiene un camión conoce de primera mano sus costos. Cuando tiene varios camiones y una organización de soporte, hay una serie de costos que pueden escapársele de su vista. Si crece más aún, sus costos indirectos crecerán y será cada vez más difícil conocerlos y asignarlos. Por lo tanto, no basta conocer los costos directos, sino que es necesario identificar los costos totales por ruta. Si no se conocen, el transportista ganará en algunas rutas, pero en otras tendrá pérdidas, por lo que sus márgenes serán exiguos. Su contabilidad reflejará los totales, de manera que estará en desventaja para establecer un sistema tarifario eficaz y moderno.

• Provisionar para la renovación del capital

Un camión representa capital. Y este capital debe ser renovado. De manera que cada camión debiera generar ingresos suficientes para pagar los costos totales, más la utilidad del transportista, más lo suficiente para amortizar la compra de un nuevo camión en un futuro. Si se hace así, decimos que estamos generando valor económico. Por el contrario, si al cabo de un tiempo el transportista se encuentra sin dinero y sin camión, habrá destruido valor económico. De manera que la contabilidad del transportista debiera efectuar las provisiones necesarias y medir continuamente la capacidad de la empresa para generar nuevo valor económico.

• Realizar mantenimiento preventivo

Con bajos márgenes y a menudo con problemas de caja, algunos transportistas postergan la decisión del mantenimiento. Y esto es simplemente postergar un problema. A la larga, el mantenimiento reactivo resulta más caro e ineficiente, ya que obliga a parar el servicio y pone en riesgo la seguridad de las personas.

• Procurar llevar carga de retorno

Finalmente, la gran oportunidad de mejoramiento es la búsqueda de carga de retorno. Nuestro país, con su geografía y su concentración del consumo en la zona central, dificulta encontrar carga de retorno desde y hacia los extremos del país. Pero encontrarla es parte del secreto del éxito del negocio del transporte. Un negocio que tiene muchas oportunidades de mejoramiento.

• Implementar el concepto de transporte sustentable

Es la actividad de transporte la que más contribuye a la huella de carbono de la Logística y en la que es dable prever más regulaciones en el futuro. El empleo de vehículos con bajas emisiones, la optimización de rutas para disminuir tiempos de espera y de viaje, el mantenimiento preventivo a los motores, son actividades que contribuyen a que esta actividad se realice en forma armoniosa con el medioambiente.