Responder a la alta tasa de crecimiento que se prevé a mediano plazo en la economía chilena, significa para el transporte de carga por camión un desafío de innovación tecnológica que requiere ser asumido de inmediato a nivel integral por el sector, eslabón principal de la cadena logística.
Actualmente, el transporte por camión moviliza el 95% de la cargas en el país. Las empresas del rubro se han modernizado y hecho grandes inversiones en equipos y tecnología. Pero, en la base de la pirámide transportadora existen muchas firmas pequeñas que constituyen el número grueso de la oferta. Por lo tanto, y dada la atomización que afecta a la base de la pirámide, se requiere inyectar una gran fuerza modernizadora y esa modernización debe sustentarse en dos conceptos: innovación en tecnología y asociatividad para generar economías de escala.
La Confederación de Dueños de Camiones de Chile, como entidad representativa de los transportistas nacionales, está ejecutando dos proyectos que son claves y determinantes para lograr ambos objetivos. El primero, denominado "Innovación Tecnológica para el Transporte de Carga por Camión", cuenta con el apoyo de Innova Corfo y realiza experiencias para adaptación de tecnologías. Con ello se espera que empresas de tamaño menor accedan a nuevos sistemas que las hagan más competitivas, capaces de aportar mayor valor a la cadena y ofrecer nuevos servicios para satisfacer la demanda de sus clientes o generadores de carga.
Un segundo proyecto es el Programa de Fortalecimiento Gremial, con apoyo de Sercotec, que entrega herramientas de fomento y promoción de instrumentos asociativos, con aplicaciones comerciales. Una reciente encuesta demostró que en las empresas de menor tamaño la asociatividad se practica bien a nivel gremial, pero falla en lo comercial por desconfianzas entre los mismos operadores de una actividad, que se miran entre ellos como rivales. Entonces, se trata justamente de cambiar esta óptica por una que favorezca las sinergias y economías de escala.
La idea es unir en los resultados ambos esfuerzos. Aplicados en forma combinada, con plazos definidos como se está haciendo, el logro que se espera es generar un transporte de carga mucho más competitivo y moderno, capaz de responder a la condición de país desarrollado que, como todos esperamos, Chile pueda conseguir a fines de esta década.