¿Por qué siempre es necesario evaluar profesionalmente al proveedor? Por Mario Herane, Gerente General de GesCom. Para resolver la problemática y entender qué es lo que ocurre en un proceso de selección de productos tecnológicos industriales, necesitamos centrarnos en algún tipo de requerimiento. Supongamos que necesitamos mejorar la iluminación de nuestra bodega y nos enfocaremos en esa problemática específica. Sin embargo, al final, se podrán dar cuenta que lo que ahora analizaremos es aplicable a cualquier proceso de decisión empresarial.
Si analizamos la cadena de decisiones, encontraremos que el comprador no tiene interés en el medio ambiente, solo le preocupa el retorno; que el diseñador de la solución, no sabe, no le interesa o le falta conocimiento técnico; que el contratista, cotiza lo más barato con el fin de adjudicarse el proyecto; y que al vendedor de productos solo le preocupa su comisión y sobrevivir.
Por otra parte, hoy nos enfrentamos a un rápido cambio tecnológico, con poca información y sin participación de los involucrados en las decisiones; los plazos y trámites de aprobación de presupuestos son muy engorrosos y extensos, y no hay reevaluación de las soluciones o productos.
Entonces, podemos concluir que la cadena de decisiones es parte del problema con la desinformación y el nulo interés de indagar más sobre el producto, dejando al mismo tiempo, de lado la sustentabilidad y el medio ambiente. Por lo que hay falta de control, inexistente reevaluación y mala regulación. Consideraciones Para evaluar correctamente una solución, es necesario considerar diversos parámetros que nos permitan determinar con exactitud las semejanzas o diferencias de las alternativas que nos ofrecen. Primero se debe determinar en qué plazo probable se ejecutará el proyecto, tomando en cuenta seriamente nuestra perspectiva de “futuro tecnológico”. Para ello, tenemos que apoyarnos en un proveedor de trayectoria que pueda brindarnos esos antecedentes y la información necesaria. Parámetros Para la iluminación industrial de una bodega, se deben analizar:
Lúmenes por Watt (lm*W): Este es un factor fundamental en iluminación industrial, ya que no solo mide la cantidad de luz que entregará una lámpara, sino que permite extrapolar la calidad de la solución, su valor, y determinar en qué parte de la línea de tiempo se encuentra el desarrollo del producto.
Archivos. ies: Estos parámetros nos permiten calcular (anticipar) la distribución de lámparas en un área específica a iluminar. Este cálculo condicionará la cantidad de lámparas necesarias y por consiguiente la cantidad de centros del tendido eléctrico, y eventualmente, la cantidad de circuitos y protecciones. El archivo.ies es específico para cada marca, tipo, potencia y ángulo de distribución de la luz, incluido el mecanismo utilizado (prisma o campana). La distribución de lámparas debe ser realizada con los archivos .ies de cada una de ellas, ya que estos parámetros son propios de cada lámpara y potencia, y no son extrapolables de una lámpara a otra.
Lo más probable es que lámparas de bajo rendimiento (calidad), no tengan archivos .ies, ya que este tipo de archivos solo se pueden obtener de centros de certificación especializados. Usualmente, para diseñar una solución se utilizan aplicaciones del tipo DiaLux, que usan los archivos .ies específicos.
Otros parámetros necesarios de evaluar son: consumo, factor de potencia, temperatura cromática, CRI (Índice de Reproducción Cromática) o RA, protección de la lámpara (grado IP), grado IK (si corresponde), protección eléctrica, certificaciones, materiales (no es lo mismo aluminio que antimonio), garantía real (no es lo mismo ofrecer estar, que estar cuando se requiere), proveedor (su presencia, tiempo en el mercado, representa o compra a Traders), plazo de entrega, y precio.
La certificación de las lámparas, sea realizada localmente o internacionalmente, tiene costo y será traspasado al valor del producto. Mientras mayor es el volumen comercializado, menor impacto tendrá en el precio. Las certificaciones más recurrentes son: certificación eléctrica, certificación lumínica, certificación del flujo luminoso, y certificación de anticontaminación lumínica. Otras certificaciones son anti explosión, grado IP y grado IK. Conclusiones Parámetros técnicos: consumo, potencia lumínica, vida útil.
Parámetros económicos: costo de los productos, de instalación, de operación, y de mantención.
Parámetros del proveedor: permanencia, seguridad sobre la garantía, conocimiento del mercado, apoyo técnico. Si toda esta información la trasladamos a una planilla, tendremos una gran ayuda para la decisión y con seguridad la decisión será certera. |