Nuestro país ha puesto en marcha el Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica (PPDA), el cual enfatiza en la reducción de emisiones de vehículos diesel a través de mejoras tecnológicas y el uso de dispositivos de postcombustión e incorpora normas más exigentes para automóviles y motocicletas, e incentivos para aquéllos de baja y cero emisión.
La iniciativa exige a todas las empresas relacionadas con el mundo automotriz adaptarse a esta nueva normativa, buscando la forma en que sus productos puedan competir en este nuevo escenario sin descuidar su calidad. Las compañías deben comprender, entonces, que sólo realizando un cambio real, será posible crecer y mantenerse vigentes. En síntesis, es imperante buscar tecnologías y entregar servicios que, además de lograr el objetivo para el que fueron creados, cumplan con el PPDA e incluso superen sus indicaciones.
Lo anterior refleja que el medioambiente es un aspecto fundamental a considerar en el área de negocios, ya que exige de cuidados y soluciones tecnológicas especiales. De esta forma, las empresas del rubro tendrán que cambiar las formulaciones de sus productos, realizar investigaciones y exigentes pruebas. Así, y de manera paulatina, el único lubricante que se mantendrá en el mercado será el sintético, pues es un producto que puede responder a las normativas Euro IV y V, es más amigable con la atmósfera y contribuye a la disminución de gases contaminantes.
En el mercado ya existen soluciones elaboradas a partir de aceites sintéticos, que son de excelente calidad y rendimiento, lo que se ha comprobado al ser sometidos a exigentes y rigurosas pruebas. Sus avanzadas formulaciones ofrecen excelentes propiedades de lubricación y protección, que favorecen un mayor cuidado del motor, mejor control de consumo de aceite y fácil arranque en frío, al mismo tiempo que protegen contra ácidos, depósitos y desgaste al motor durante su vida útil.
En el caso del combustible, se deben buscar nuevas formulaciones que ayuden a la reducción de emisiones contaminantes y menor consumo del mismo, pero que además mantenga a largo plazo la eficiencia operativa de los vehículos y otorgue menores costos de mantenimiento.
Hoy se están desarrollando productos que permiten mantener los componentes del motor limpios debido a sus propiedades detergentes, evitando que el gasto de combustible aumente. Esto se logra con formulaciones diseñadas para entregar una mayor eficiencia de combustión durante una vida útil más prolongada del vehículo, al mantener los inyectores libres de depósitos de carbono, lo que significa una carburación más efectiva y, por consiguiente, una reducción en el consumo de combustible y costos por concepto de mantenimiento.
Cuando el aire y el combustible se mezclan en el motor, el resultado de la combustión de carbono, hidrógeno y oxígeno se transforma en CO2 y agua. Estas emisiones están directamente relacionadas con la cantidad de combustible que usa el vehículo, es decir, si se reduce el consumo de combustible, automáticamente disminuirán las emisiones de CO2 en el mismo porcentaje.
En el fondo es importante recalcar que la alternativa que tienen las empresas de aportar al cuidado del medioambiente es justamente alinearse con la naturaleza a través de la tecnología, para lograr la armonía necesaria que posibilite a la industria sustentarse en el nuevo escenario energético que enfrentamos en Chile y el mundo.