Por Cynthia Perisic Ivandic, Gerente General ALOG Chile A.G.
Cynthia Perisic Ivandic.
La exportación de fruta fresca es un sector de vital importancia para el crecimiento económico del país, por lo cual se hace cada vez más necesario contar con una cadena logística que asegure el traslado de las frutas, de acuerdo a las necesidades de cada exportador.
Y si bien los servicios que ofrece la industria logística nacional han permitido hacer frente a los desafíos en años anteriores, de igual modo existen aspectos relevantes de la cadena que se deben abordar con la coordinación necesaria de parte de todos los actores que la componen.
En este sentido, una de las principales dificultades que enfrenta la industria en esta temporada se da respecto de la capacidad de las operaciones que se pueden realizar en el Aeropuerto Internacional de Santiago, donde existe una serie de impedimentos que han dificultado las mismas. Esto se hace aún más gravitante si consideramos que en los últimos años ha aumentado el número de exportaciones vía aérea -especialmente de cerezas y arándanos-, en gran parte por la capacidad que posee este medio para enviar la fruta en menor tiempo, asegurando la calidad del envío.
Respecto de este punto, la principal dificultad que se enfrenta pasa por el colapso que se genera en el sector de carga, donde ya es casi una tradición que cuando los primeros berries y cerezas intentan llegar rápido a Asia y Estados Unidos, se copan las terminales internacionales de carga. Esto significa que la fruta quede por largas horas esperando, deba cambiar de destino o quede abajo de los aviones, lo que se traduce en pérdidas de calidad y económicas.
Esta situación se torna extremadamente compleja durante toda la temporada alta, siendo especialmente críticos los embarques durante los fines de semana, donde las demoras parten en las cuatro horas y se pueden extender incluso a días. El gran problema pasa por la acumulación de toneladas de exportación, sobre todo porque se cruza con el pescado que sale todo el año, y como la fruta es un perecible, hay que darle una rotación rápida.
Otro de los problemas que presenta es la necesidad de una mayor oferta de compañías aéreas que permitan responder a las necesidades de exportación, más aún considerando que las proyecciones de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile A.G. (Asoex) prevé para esta temporada 2015-2016 un volumen de envío de frutas frescas similar al registrado durante la campaña 2014-2015, ocasión en la que se alcanzó un total de 2.399.976 toneladas exportadas a los diferentes mercados.
Tampoco deja de preocupar a la industria la posibilidad de paros al interior de los organismos fiscalizadores, considerando que aún persisten situaciones complejas que hacen temer que podría ocurrir una nueva paralización.
No obstante, vemos con optimismo el trabajo que se debe desarrollar a mediano y largo plazo con los nuevos controladores del Aeropuerto Internacional de Santiago, con quienes ya hemos sostenido reuniones para abordar estos temas, obteniendo una favorable acogida.
Autora:
Cynthia Perisic Ivandic es Master en Dirección de Negocios Internacionales y en Dirección General de Empresas, ambos títulos de la Universidad Europea de Madrid. Con una vasta experiencia en transporte aéreo de carga, su trayectoria profesional incluye empresas como Ladeco Cargo, Fast Air, Martinair Cargo y Schenker Chile. Actualmente, ocupa el cargo de Gerente General de la Asociación Logística de Chile-Alog Chile A.G.