Por Juan José Izcúe, Gerente General de Senegocia.
Juan José Izcúe
El OTIF es un indicador de desempeño de la industria logística que refleja el porcentaje de despachos que llegan a tiempo (On Time), con el producto y cantidad solicitados, y al lugar indicado por el cliente (In Full). En los últimos años, se le ha agregado también la facturación correcta, es decir, que el despacho venga con la documentación, física o electrónica, en la forma que el cliente y la legislación vigente la exigen. En el caso de grandes empresas intensivas en procesos logísticos y recepciones de despachos, como una gran tienda o un hipermercado, resulta imperativo que este índice sea superior al 90%.
Para muchos expertos, este es el indicador más importante en cualquier proceso logístico, ya que de él se derivan todos los demás. Lo interesante de este índice, es que los directivos de la empresa pueden ver rápidamente si el objetivo de proporcionar correctamente lo solicitado por el cliente se está cumpliendo o no. Por lo tanto, es una cifra que todo responsable de abastecimiento, compras, logística o de cadena de suministro, debiera gestionar en forma permanente.
Para lograr llevar el indicador OTIF a sus más altos niveles, la empresa despachadora debe tener capacidad de procesamiento de órdenes, proveedores que le cumplan, habilidad de recepcionar múltiples pedidos, capacidad de bodegaje flexible, sistema de picking, facturación en línea, sistema de transporte eficiente y alarmas de inventarios críticos, entre otros.
Una muestra de su relevancia para las grandes empresas, es que muchas de ellas exigen que sus despachos se realicen en días y horas específicas y que, además, se entreguen con la documentación especial que exigen. Aquellos proveedores que no cumplen con los despachos OTIF, muchas veces reciben multas por parte del cliente o simplemente no se les acepta los despachos.
Beneficios de las órdenes OTIF
Las órdenes OTIF generan importantes ahorros para la empresa mandante, en la forma de reducción de gastos operacionales, mayor control de calidad, mejor control de inventario y mejor utilización del espacio de bodegaje. Asimismo, aportan al aumento de ventas, ya que se dispone de mercadería para la sala de ventas.
En este sentido, la pregunta que surge para la empresa compradora y la despachadora, es: “¿qué tan alto se quiere tener el indicador OTIF?”. Esto, dado que, mientras más alto el indicador, existen claros beneficios, pero también mayores costos. Por lo mismo, algunas compañías han optado por flexibilizar la métrica OTIF: para el caso del “On Time”, se aumentan las horas o días de recepción; y para el “In Full”, se reduce la exigencia de la cantidad. La empresa debe preguntarse, entonces: “¿qué tan perfecta quiero tener esta métrica y dónde tiro la raya?”.