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Proyectos Logísticos Industriales: Una respuesta al desafío de integración de los procesos | | Por Marco Opazo Ziem, Gerente General de MIB Management & International Business. marcoopazo@mib.cl - www.mib.cl | | | | | | Para satisfacer los nuevos objetivos de desempeño, el proceso logístico debe integrar todo el trabajo necesario y, obviamente, evitar el que no sea necesario. El trabajo interno relacionado con la logística de la empresa debe ser, por una parte, coordinado y, por otra, integrarse operativamente a lo largo de la Cadena de Suministros. Como respuesta a esta problemática, surgen los Proyectos Logísticos Industriales, los cuales concentran una serie de servicios a la industria, tales como Gestión de Almacenamiento, Gestión de Pedidos, Gestión de Transporte y Distribución de Productos, Logística Inversa o Devolución de Materiales a los Almacenes, Bodegas o Centros de Distribución, Control de Inventario y Control de la Cadena de Frío, entre otros. En este sentido, es conveniente considerar la ubicación de los Proyectos Logísticos, su conectividad y cercanía a los centros urbanos, así como las características y dimensiones de los parques, de manera de calcular sus capacidades en áreas y volúmenes. También se hace necesario considerar el equipamiento de manutención, como transpaletas mecánicas, eléctricas, transelevadores, montacargas, grúas horquilla y tecnologías como captura de datos a través de RFID, sistemas WMS y TMS o la comunicación eficiente de datos con las plataformas ERP. En otras palabras, el desafío del Proyecto Logístico consiste en reinventar el proceso logístico que actualmente se aplica en la empresa. A nivel operativo, es importante para los gerentes de logística identificar y compensar deficiencias: debe existir una integración y cooperación interfuncional en la gestión de las operaciones de los procesos logísticos, desde la procuración de los insumos hasta la entrega de productos con el nivel de servicio al cliente establecido. Factores que afectan la optimización global La administración de la variabilidad y el logro de la optimización global en el Proyecto Logístico se han visto notablemente afectados por las siguientes tendencias actuales: La globalización, ya que se requieren mayores y más complejas líneas de abastecimiento, sistemas de inventario y redes de distribución. El outsourcing, ya que involucra mayor cantidad de actores en la Administración de la Cadena de Abastecimiento. La proliferación del SKU (stock keeping units), ya que la demanda tiene mayores posibilidades de elección, resultando en mayores coeficientes de variación. Los ciclos de vida de los productos más cortos, ya que resulta en falta de información histórica, reduciendo la habilidad predictiva de la Organización. Los cambios tecnológicos cada vez más rápidos, implicando productos con ciclos de vida más cortos y evolución tecnológica intensa para adaptarse al medio. Asimismo, se debe considerar que la competencia intensa entre las organizaciones con productos afines; y las nuevas regulaciones de seguridad, ingresadas posteriormente a los ataques terroristas del 11 de Septiembre del 2001, han incrementado el costo y la variabilidad de las operaciones logísticas. Comercialización y Distribución Dentro de los nuevos enfoques que utiliza el Proyecto Logístico Industrial a nivel de comercialización y distribución, se encuentran el DRP (Distribution Resource Planning). No todas las unidades de producción distribuyen directamente sus productos hacia los consumidores finales, existiendo casos en los que la distribución se realiza a lo largo de una red de almacenes situados a distintos niveles, a través de los cuales van pasando los ítems hasta llegar a los clientes finales. En estos casos, la única demanda independiente sería la de los puntos de venta en contacto con el mercado; el resto, es decir, las necesidades de productos de los centros situados en otros niveles de la red, sería demanda dependiente. Así, la demanda de un centro tendrá en cuenta, además de los pedidos de clientes, los de aprovisionamiento, que no tienen por qué coincidir con la demanda final de éste, ya que los pedidos dependerán del método de cálculo del lote y del nivel de stock de seguridad, entre otros aspectos. En este tipo de organizaciones, por los mismos motivos planteados, no resulta idónea la aplicación de los métodos clásicos de gestión de stocks, apareciendo el DRP como método alternativo para la planificación y control de los inventarios en dicho caso. El cálculo de necesidades en DRP se basa en la aplicación de los conceptos de MRP a distribución, de forma que cada centro emite sus pedidos al nivel superior con la antelación suficiente para que sean recibidos en la cantidad y momento adecuados. Si bien DRP puede actuar como una técnica autónoma, es decir, aplicando el método sólo para la tarea de distribución, también puede funcionar como una extensión de un sistema MRP II, siendo de gran importancia en aquellas compañías en las que se encuentran integradas las operaciones de fabricación y distribución. La importancia de esta situación conjunta con MRP II se manifiesta por el hecho de que comparten la base de datos, el sistema de previsión de demanda, el sistema de gestión de inventarios, entre otros elementos, y estos configuran una base importante para una adecuada planificación integrada, tanto a nivel de producción como de distribución. Además, los Proyectos Logísticos utilizan el concepto ECR (Efficient Consumer Response), cuyo origen se remonta a 1989 en Estados Unidos, donde Procter & Gamble y Walmart iniciaron y desarrollaron las técnicas ER y EPOS. El ECR surge como una iniciativa para dar respuesta al papel creciente del servicio al cliente como protagonista de las estrategias empresariales, centra su atención en mejorar la relación entre el proveedor y el detallista, y busca la consecución de una reducción de los costos logísticos entre ambos y una participación de los beneficios que de ella se deriven. Comparando esta metodología con el sistema tradicional ( Push), que se produce sin tener en cuenta la demanda, este método pretende un cambio de actitud en la relaciones suministrador/detallista mediante la coordinación y acercamiento a las necesidades del consumidor (Pull), en línea con la filosofía Just in Time, dando pie así a la logística inversa. | |
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Noviembre 2012 |
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