Ricardo Jiménez, Senior Manager, Climate Change & Sustainability Services de KPMG Chile “Los impuestos verdes serán un aporte en la lucha contra el cambio climático” ¿A qué industrias afectaría este “impuesto verde”? Básicamente, se trataría de emisores de contaminantes primarios de material particulado y CO2, como es el sector de generación eléctrica, específicamente las termoeléctricas, que funcionan en base a combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas natural), que liberan a la atmósfera esos contaminantes por procesos de combustión. En este sentido, los efectos serían mayoritariamente financieros, porque estamos hablando de gravar por cada tonelada emitida de CO2 o de contaminantes primarios. ¿Se destinarán estos impuestos a temas medioambientales? Los impuestos en Chile van todos a un mismo fondo, desde donde se destinan a las diferentes necesidades que tiene cada entidad gubernamental. En lo personal, soy partidario de que cuando se recaudan “impuestos verdes”, esos fondos deberían ser dirigidos a una estrategia país en temas ambientales, como por ejemplo, el financiamiento de una economía baja en carbono. Sin embargo, será el Ministerio del Medio Ambiente el que en su momento tendrá que entrar a luchar por una parte de esos impuestos que fueron recolectados por esta vía. ¿Cómo se comparan los impuestos “verdes” con otras medidas, como los bonos de carbono? Si bien tienen como objetivo reducir las emisiones de CO2 de la industria, van por caminos distintos. Creados en parte por el Protocolo de Kyoto, los bonos de carbono permiten que una empresa que disminuye sus emisiones de CO2, pueda vender esta reducción a compañías de otros países obligadas a bajar sus emisiones, generando beneficios tanto económicos como ambientales. Ahora bien, los “impuestos verdes” gravan cada tonelada de contaminantes emitida, lo que se espera impulse a las empresas afectadas a optimizar sus procesos. Pero, después de este primer acercamiento, es posible que se analice la implementación de un sistema “cap and trade”. Si el país tiene una baja emisión de CO2, ¿es una buena idea instaurar estos impuestos? Sí, porque Chile es uno de los países que más ha aumentado sus emisiones a nivel mundial, y si sigue esta tendencia, podría convertirse en un emisor importante. Además, el cambio climático es un problema global que necesita una solución global, por ello cada país debe buscar una transición hacia una economía más verde. En este sentido, esta clase de políticas también apoya en cierta medida el desarrollo de nuevas fuentes energéticas y el hecho de volverse menos dependientes de terceros en el campo energético. ¿Están actualmente las condiciones para que esto resulte exitoso? Estamos en el momento preciso, ya que los temas medioambientales se han puesto en la proyección de las empresas. Sin embargo, se deben aclarar los efectos que tendrá el proyecto, directa o indirectamente, en otras esferas industriales. Por ejemplo, este proyecto de ley, podría afectar al sector del Transporte de Carga, que es otro de los grandes productores de emisiones de CO2 a nivel país, pues se cobrará impuestos por importación de vehículos diesel. En definitiva, son temas que se tendrán que discutir en algún momento. |