Un estudio realizado por la ACHS determinó que, a diferencia de la creencia de que los accidentes laborales ocurren por causas graves o por la exposición a equipos o herramientas de gran envergadura, el mayor porcentaje de los incidentes se debe a golpes y caídas asociadas a actividades rutinarias (como caminar, subir o bajar escaleras, o mover objetos, entre otras).
“Si bien hemos logrado bajar la tasa de accidentabilidad, todavía persisten una serie de accidentes que, aunque considerados leves, tienen un alto impacto en la economía y productividad”, explica Arturo Cares, Gerente de Prevención de la ACHS. “Estos accidentes -que podrían parecer muy menores o leves- no solo representan el 40% de los accidentes del trabajo a nivel nacional, sino que además significan cerca de 860 mil días de reposo al año, lo que implica un impacto para la productividad de las empresas y para las familias de las personas que los sufren”.
En este sentido, el ejecutivo indica que este tipo de accidentes se asocia principalmente a comportamientos de las personas, más que a las condiciones existentes en el entorno laboral. “Por lo tanto, debemos apelar al trabajo en conjunto entre empleadores, trabajadores, comités paritarios y expertos en prevención, para tomar medidas preventivas”.
En cuanto a las partes del cuerpo perjudicadas en estos accidentes, Cares señala que las caídas afectan en un 36% a las extremidades inferiores, mientras que los golpes, en un 35% a las extremidades superiores. “Dado que en promedio estos accidentes implican 14 días de reposo, hay que tener en cuenta que no solo se genera un impacto en las actividades laborales, sino también en las labores habituales que se realizan fuera del trabajo”, afirma.
¿Cómo evitar los accidentes de golpes y caídas?
En general, estos accidentes se asocian a actividades rutinarias que, producto de su repetitividad, se realizan en forma prácticamente automática, perdiéndose así un elemento clave para llevar a cabo cualquier actividad: la atención a las condiciones del entorno.
En este sentido, muchos de los accidentes por golpes y caídas se deben a:
Estar distraído mientras se trabaja o desplaza, como por ejemplo, mirar el celular mientras se camina.
Poner las manos cerca de equipos en movimiento.
Ausencia de orden y aseo, generando obstáculos que puedan causar una caída.
Improvisar superficies de trabajo, especialmente para alcanzar objetos que se encuentran en altura.
Ubicarse bajo o en la cercanía de objetos que pueden caer.
No utilizar el pasamanos al subir o bajar por una escalera.
Trasladar objetos que impidan mirar por donde caminamos.
Cifras
En 2016, hubo un total de 189.885 accidentes laborales, de los cuales 144.522 tuvieron como resultado al menos un día de reposo. De este grupo, el 40,8% de casos corresponde a accidentes cuyo origen se debe a golpes o caídas en el lugar de trabajo.
El 56% de los accidentes por caídas se registró en mujeres y el rango de edad donde es más frecuente que se produzcan es entre los 46 y los 55 años. Los hombres representan el 44% de los casos y se caen más entre los 26 y 35 años.
En cambio, en los golpes, los hombres representan el 68% de los casos y la gran mayoría se golpea entre los 26 y los 35 años. Por otra parte, las mujeres representan solo el 32% de los casos y se golpean más entre los 26 y los 35 años.