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Frente a la criticidad e importancia del óptimo funcionamiento del sistema eléctrico en el territorio nacional, la implementación de un Sistema de Gestión de Integridad de Instalaciones Eléctricas (SGIIE) -normada mediante Resolución Exenta N°31.876 del 3 de marzo de 2020- maximiza las condiciones de seguridad, continuidad y calidad de suministro eléctrico de las instalaciones, por medio de la prevención de accidentes e incidentes, y la minimización de sus consecuencias, en caso de que estos ocurran.
La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) estableció un plazo de cuatro años para cumplir con esta exigencia, desde la publicación del pliego técnico normativo, lo que implica que para el 3 de marzo de 2024 las organizaciones deberán demostrar que cuentan con un SGIIE implementado y operativo.
Si bien la normativa actual no indica el tipo de sanción que califica para el incumplimiento, en base a la cuantificación de multas que indica el Estado en materia energética, podrían arriesgar pagos entre 500 y 10,000 UTM, si no cumplen con la exigencia en el plazo establecido.
“Al ver cómo han aumentado masivamente las empresas coordinadas en los últimos cuatro años, sumado a los proyectos próximos a conectarse, no hemos visto énfasis ni celeridad en la definición de una estrategia de fiscalización a través de la SEC, ya que no existen sanciones ni un listado oficial para que se cumpla la normativa vigente, lo que arriesga la seguridad del sistema”, comenta Abril Acuña, subgerente de Nuevos Negocios de Roda Energía.
“Vemos un universo de alrededor de 500 compañías que debiesen demostrar la implementación de su SGIIE, y creemos que un número muy bajo de ese universo ha tomado acción al respecto”, agrega.
El SGIIE debe ser implementando por empresas del rubro eléctrico que cuenten con instalaciones de producción, transformación, transporte y distribución de energía eléctrica, sin embargo, su alcance también incluye instalaciones eléctricas, como subestaciones y líneas de transmisión, de clientes no regulados que sean coordinados por el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN), como es el caso de algunas empresas de la gran minería e industria.
Todo sistema de gestión implica un esfuerzo por parte de las compañías, tanto en su implementación como en su operación, y ésta no es la excepción. Sin embargo, este esfuerzo les otorgará también múltiples beneficios. Además de gestionar los riesgos y maximizar la operatividad de los activos, permite obtener un análisis amplio y completo del ciclo de vida de cada activo o cartera de activos, permitiendo reducir los tiempos de indisponibilidad y minimizar riesgos del sistema.
Adicionalmente, un SGIIE permitirá mejorar la información para la toma de decisiones relacionadas a la inversión, reducir costos de operación y asegurar el desempeño no solo de los activos, si no del negocio mismo, lo que se verá reflejado para las instalaciones eléctricas que ya están en operación, como en aquellas que se construyan a futuro en línea con las proyecciones de crecimiento del Sistema Eléctrico Nacional.
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