Por Víctor Moraga, Product Manager DIN Rail Products de la División Low Voltage Products de ABB en Chile.
Víctor Moraga.
Si todos comenzamos a utilizar de mejor forma la energía, puede tener repercusiones importantes a largo plazo respecto a la conservación de los recursos y a la reducción de los gases de efecto invernadero, pero primero debemos contar con un mecanismo eficaz de medición de nuestro consumo que presente los datos de forma que sean fáciles de interpretar y definir acciones al respecto. No podemos seguir desconociendo la cantidad de energía que consumimos, cuándo la consumimos y a qué precio, o si consumimos más energía en horas punta o de valle, y la medición inteligente parece ser la mejor alternativa para captar los datos de consumo de un edificio.
Submedición
La submedición es aquella medición de energía que no se utiliza para facturación a través de la compañía de distribución eléctrica, sino más bien para conocer dónde y cuánta energía se consume en un determinado sector de una instalación. El medidor de facturación se instala únicamente para efectos de cobro, mientras que el de submedición para monitorizar.
que el de submedición para monitorizar. Monitorizando el consumo de potencia y energía para cada línea de producción, sector o edificio, ya sea local o remotamente, el usuario puede descubrir el sobreconsumo de determinadas cargas conectadas a su red (motores, maquinarias, iluminación, etc.). Así, podrá implementar una subdivisión del consumo o dividir la instalación en distintos grupos o divisiones de consumo para poder controlar el gasto energético de manera individualizada. De este modo, el administrador de la instalación puede asignar y traducir económicamente a cada subdivisión el gasto asociado a cada una de ellas, promoviendo a su vez la concientización del gasto energético.
Los contadores de Energía para submedición deben estar certificados según la normativa IEC y verificados según la directiva MID (Measuring Instruments Directive 2004/22/EC) de la Comisión Europea. Esta aprobación cubre todos los aspectos técnicos relevantes del contador, tales como: condiciones climáticas, compatibilidad electromagnética (EMC) o requisitos eléctricos y mecánicos como la precisión del contador.