Si bien los sistemas de alimentación ininterrumpida (en inglés, Uninterruptible Power Supply o UPS) se vinculan generalmente a aplicaciones en el ámbito corporativo (donde se resguardan el funcionamiento de las plataformas informáticas), son muy usados en plantas industriales, especialmente para garantizar la continua operación de aplicaciones basadas en sistemas de control, como PLC, PC industriales, y similares. Para estos casos, un grupo electrógeno no es suficiente, pues no entrega un suministro continuo, permitiendo que un apagón, por ejemplo, reinicie el equipo controlador, provocando una serie de problemas posteriomente.

Al respecto, Fabián Hernández, Lead Business Unit of Factory Automation de Siemens Chile, explica que las aplicaciones industriales requieren de una muy alta disponibilidad de los sistemas involucrados, por lo que una UPS (o cualquier otro equipo parte del sistema), debe garantizar la continuidad del proceso productivo. Es por esto que, tanto el diseño, la construcción, operación, mantenimiento y soporte del equipo, deben ser de un grado y robustez industrial.

“Al ser un sistema de alimentación ininterrumpida, las principales características o prestaciones que se deben tener en cuenta al elegir una UPS son conocer qué se desea alimentar, dónde se instalará físicamente, qué autonomía se desea tener ante una pérdida de la alimentación externa y la necesidad de contar con información online del funcionamiento de la UPS, para la gestión y toma de decisiones”, recomienda.

Para Luzgarda Del Valle, Gerente General de MEE, la principal característica de la UPS Industrial es su fabricación, dado que se trata de equipos diseñados para ambientes altamente contaminantes, “en donde la polución y la corrosión dañan generalmente los sistemas tradicionales, desarrollados para operar en ambientes controlados”. “Al ser equipos con diseño industrial, desarrollados en fábrica tal y cual el cliente lo desea, se disminuyen los puntos de falla, a diferencia de los equipos integrados nacionalmente, en donde existen diferentes componentes, con diferentes proveedores, y en consecuencia, diferentes posibles fallas en el funcionamiento”, agrega.

Por su parte, Julio Vera, Gerente de Producto de Fabelec, comenta que, al elegir una UPS industrial, dos parámetros de suma importancia son el porcentaje de eficiencia del equipo, es decir, cuánta energía consume para entregar la potencia máxima; y el factor de potencia (a mayor factor de potencia, mejor). “Asimismo, hay que evaluar la calidad y vida útil de las baterías, así como la garantía, que representa la confianza que el fabricante tiene en sus equipos. Mientras más extendida sea, mejor es el equipo”, afirma.

Al hablar de otras prestaciones que debe tener hoy en día una UPS para uso industrial, Vera indica que “todo depende de la aplicación a la que será sometida, pero un sistema de comunicación es muy importante para poder controlar remotamente su funcionamiento”.

Coincidiendo con lo anterior, Hernández añade que las funcionalidades de comunicación a sistemas externos permiten visualizar y administrar inteligentemente el uso de baterías, vigilar la disponibilidad del servicio, gestionar y monitorear alarmas, entre muchas otras funciones. Incluso, hay UPS con servidor web integrado, lo que ofrece la posibilidad de monitoreo remoto.

Para este ejecutivo, el sector industrial requiere tener UPS con alto nivel de performance, eficiencia, robustez e inteligencia integrada, dedicadas a las diferentes aplicaciones de este rubro. “Por ejemplo, existen modelos de UPS especialmente diseñados para dar autonomía a sistemas industriales de Control y Automatización, que emplean normalmente una tensión de alimentación de 24 VDC. Estas UPS entregan un suministro de tensión ininterrumpida en este nivel de voltaje, con un diseño modular y pequeño, que permite montarlos en Riel DIN dentro de un tablero”, señala. “Todos estos avances tecnológicos más un reconocido nivel de calidad posibilitan una muy alta disponibilidad de los sistemas de alimentación a sistemas productivos industriales críticos”.

En lo referente a la instalación de estos sistemas, Vera recomienda colocarlas en ambientes ventilados y con los rangos de temperatura y humedad especificados por el fabricante. “Si se trata de un ambiente agresivo, las UPS se deben acondicionar para soportar dicho ambiente. Además, se aconseja poner la carga lo más cercano posible del equipo UPS, ya que mientras más corta sea la línea de alimentación de la carga, menor es la cantidad de ruido eléctrico que capta”, declara.

Tan importante como el equipo en sí, resulta ser el proveedor del mismo. En este sentido, Luzgarda Del Valle indica que el primer criterio para definirlo debe ser la calidad. “Que sean capaces de certificar que sus productos cumplen los estándares nacionales e internacionales, asegurando al cliente un proceso continuo, sin interrupciones, y, por supuesto, en el lugar en que se encuentre ubicado, independientemente de las condiciones ambientales”, sugiere. Para la ejecutiva, otra exigencia a tener en cuenta es la Asesoría. “El proveedor, a través de su equipo de ingeniería y servicio técnico, debe estar capacitado para entregar la asesoría técnica necesaria según los requerimientos del cliente, y en base a la solicitud del usuario y las condiciones, ser capaz de determinar el equipo industrial necesario para su operación”, asegura.