DESAFÍOS DE LA DISTRIBUCIÓN ELÉCTRICA
Inversión, ERNC y empoderamiento social | | | |  | | Para una economía como la chilena, el suministro de electricidad (seguro y constante) es un aspecto fundamental para “soportar” su constante ritmo de crecimiento. A nivel residencial, comercial o industrial, los peaks de consumo se han incrementando con el correr de los años, lo que sin duda representa un desafío para los actores del mercado de la distribución.
A fin de graficar lo anterior, Cristián Fierro, Gerente General de Chilectra, entrega un dato bastante interesante: “Hemos sido un mercado que ha sabido acompañar el sostenido crecimiento que ha experimentado la demanda en los últimos 30 años en nuestro país. A modo referencial, el consumo promedio residencial a comienzos de los años 80 era de 70 kWh en Chilectra, mientras que hoy alcanza los 220 kWh, es decir, tres veces más”.
Este escenario demuestra que Chile requiere invertir en nuevos MW, así como también en optimizar la infraestructura que se tiene actualmente. Es cierto que cada vez son menos frecuentes los clásicos “apagones”, pero eso no quiere decir que la inyección de nuevos capitales no sea un tema influyente.
“En materias energéticas, específicamente en lo que se refiere a la electricidad, nuestra demanda aumenta en una proporción muy superior a nuestra oferta, por lo que equiparar nuestro consumo futuro con nuestras capacidades de generar, transmitir y distribuir energía eléctrica es una tarea pendiente como nación. Siendo nosotros, los distribuidores, el último eslabón de la cadena, nos encontramos en una posición compleja, ya que tenemos poca injerencia en la solución del problema pero, al mismo tiempo, aparecemos cómo los responsables directos frente a los clientes”, explica Carlos Bächler Magalhaes, Gerente General Corporativo del Grupo Empresas Puente Alto.
Los grandes polos de consumo Según datos aportados por José Eduardo Muñoz, Presidente del Comité Eléctrico de la Asociación de la Industria Eléctrica-Electrónica (AIE), hoy nuestra capacidad de generación es cercana a los 17.000 MW y se espera que el crecimiento anual de la demanda de energía bordee el 4% promedio entre el SING y SIC. Si a eso sumamos el hecho de que entre la Minería y la Industria concentran más del 60% de la demanda, quedando el sector residencial con una participación cercana al 20% del total, es claro donde están los grandes bloques de consumo de energía en Chile.  | | Cristián Fierro, Gerente General de Chilectra. | |  | | Carlos Bächler Magalhaes, Gerente General Corporativo del Grupo Empresas Puente Alto. | |  | | José Eduardo Muñoz, Presidente del Comité Eléctrico de la AIE. | | “Esto hace que la preocupación de la industria de distribución eléctrica está centrada en los próximos procesos de licitación, buscar nuevas formas de cooperación e integración con proveedores estratégicos que suministran tecnologías de punta e implementar sistemas de Eficiencia Energética. Esto tiene que ir ‘de la mano’ con el Estado para que los escenarios energéticos futuros permitan que las reglas del juego sean lo suficientemente eficaces e igualitarias en virtud de la gran inversión en infraestructura, equipos y servicios que necesitamos”, añade el ejecutivo.
Viendo lo anterior, el proyecto de Carretera Eléctrica asume una mayor importancia, pues será la “columna vertebral” de un sistema que planea la transmisión y distribución de energía hacia los grandes polos de consumo que encontramos en Chile: Zona Central y Norte. Sin embargo, nuevamente será la ciudadanía la que juegue un rol protagónico, más aún cuando la generación se realizará, en gran parte, en la zona sur de nuestro territorio.
Smart Grid y ERNC
Frente al desafío de incrementar los MW distribuidos y suplir una creciente demanda, las redes inteligentes y la integración de Energías Renovables No Convencionales (ERNC) asoman como una alternativa real para las distribuidoras. Con ello se optimizará un servicio que es vital para el funcionamiento de cualquier economía.
“Desde nuestra perspectiva, las condiciones previamente citadas transforman a las ERNC, ya sea a través de grandes proyectos o de instalaciones de tipo residencial, en una alternativa cada vez más viable. Sin embargo, la implementación no es la deseable. Por una parte, existen deficiencia y errores conceptuales desde lo regulatorio, particularmente en el aspecto tarifario. Y por otra, sin duda la más relevante, es el hecho de entender que este se trata de un tema regulatorio, cuando la solución está en la implementación de sistemas reales y completos, como lo son las Redes Inteligentes”, asegura Carlos Bächler Magalhaes.
No obstante, como país enfrentamos un nuevo desafío, esta vez relacionado con la ley de Net Metering y el rol de las ERNC. “Consideramos que la ley de Net Metering no se hace cargo adecuadamente de las estructuras tarifarias del servicio eléctrico. Particularmente, de la tarifa BT-1, que es eminentemente residencial, cuya estructura reconoce en un solo precio de energía los conceptos de energía (asociado al uso de combustibles) y de potencia (asociado a las inversiones)”, explica el Gerente General de Chilectra.
Además, el profesional añade que “los paneles fotovoltaicos evitan la generación de energía de las grandes centrales. Evitan quemar combustibles fósiles o desembalsar agua. Pero no evitan el realizar las inversiones. En términos técnicos, no disponen de potencia firme. Las empresas distribuidoras, responsablemente, deben diseñar sus instalaciones asumiendo que estas fuentes distribuidas no existen. Basta un día nublado y este aporte desaparece”.
El rol de la ciudadanía
Si antes un proyecto de generación consideraba variables técnicas y comerciales, hoy debemos añadir un aspecto más: la sociedad. Cada día es más común ver a las personas analizando -desde un punto de vista medioambiental o personal- el tipo de energía que quieren consumir y los costos que cancelan por ésta.
Así lo explica José Eduardo Muñoz, quien agrega que este es uno de los desafíos más interesantes del mercado de la distribución en Chile. “Una de las principales barreras es la mirada que tiene la industria y el mercado residencial en particular, sobre los costos de la energía eléctrica en Chile. Superamos en más de un 60% el costo de la energía promedio que informa la OCDE en sus últimos comunicados. Lo anterior significa un gran desafío, no tan solo para las empresas eléctricas en particular, por lo que debemos asumir transversalmente este problema a fin de lograr el bien común, que es justo y necesario”.
Lo cierto es que llegó el momento de actuar y definir cómo política de país los desafíos y oportunidades que ofrece el mercado de la distribución. Llegó el momento de tomar decisiones reales y concretas, pues recordemos que las políticas de hoy determinarán la energía del futuro. 
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