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Más de un millón de vehículos podrían salir de Santiago durante el fin de semana XL de Fiestas Patrias, por lo que se espera una reactivación tanto del turismo como del mercado de arriendo. Si estás buscando alojamiento o tienes una segunda vivienda que quieres arrendar, considera la firma de un contrato para hacer más segura la transacción.
Y es que, como las palabras se las lleva el viento, lo mejor -para ambas partes- es formalizar el acuerdo, aunque se trate de un arriendo por pocos días.
“Basta con invertir unos minutos para reducir significativamente el riesgo de ser víctima de una estafa. Con un contrato de por medio, la persona que arrienda su casa o departamento garantiza que cumplirá con lo prometido; mientras que el arrendatario que hizo la reserva se compromete a pagar la suma acordada”, explica el CEO de FirmaVirtual, Christian Rodiek.
Cuando se aproxima un fin de semana largo es fácil toparse con atractivas ofertas asociadas a propiedades que no existen; o con personas que -tras un acuerdo de palabra- se arrepienten de arrendar el inmueble un par de días antes de la fecha reservada, lo cual, genera perjuicios para quien contaba con el ingreso asociado a la renta.
Sin embargo, al firmar un contrato las reglas quedan claramente establecidas para las dos partes. “Gracias a la firma electrónica -amparada por la Ley 19.799 desde hace más de 20 años- no es necesario tener que trasladarse a una notaría para que el contrato tenga valor probatorio en un eventual juicio. Además, el documento puede certificarse ante notario si los firmantes quieren añadir una dosis de seguridad extra”, detalla el fundador de la plataforma FirmaVirtual.
En el contrato de arriendo, no hay que olvidar consignar -al menos- los siguientes datos: nombre completo, número de identificación, dirección de ambas partes, ubicación del inmueble, plazo de arriendo, monto y forma de pago.
Además, la Ley de Arriendo 21.461 -conocida como “Devuélveme mi Casa”- introdujo varias modificaciones que vinieron a reforzar la seguridad de los contratos de arriendo en Chile. El procedimiento judicial monitorio -que contempla la nueva norma- disminuyó los tiempos de tramitación en tribunales y, al mismo tiempo, aceleró la restitución de las propiedades.
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