¿Qué factores motivaron el lanzamiento de esta guía? El motivo principal era dotar de una herramienta de apoyo a los arquitectos, diseñadores y usuarios en materia de optimización del diseño y de los parámetros de construcción que hay que tener en consideración para que una vivienda logre ser eficiente y sustentable. La guía aporta estrategias y recomendaciones para ahorrar energía y generar mayor confort lumínico y acústico; y se refiere a los diseños que responden a la realidad climática de las diversas zonas del país, lo que aporta a la sustentabilidad en los diseños de vivienda social. Paulatinamente, desde la década de los noventa, hemos ido mejorando los estándares técnicos en materia de eficiencia energética dentro de la legislación constructiva chilena. ¿En qué consiste el proyecto piloto llevado a cabo en Lo Espejo? Es un fondo solidario orientado a familias de menores recursos, el cual incorpora tecnologías energéticas sustentables para las viviendas sociales. Cada uno de los 125 hogares favorecidos cuenta con un sistema de colectores solares para calentar el agua sanitaria, lo cual significará ahorros importantes que bordearán efectivamente por sobre el 60% en la cuenta mensual de gas licuado. Además, las viviendas cuentan con un mejoramiento del estándar térmico de la envolvente (muros perimetrales). Pero este proyecto tiene un impacto no sólo económico, ya que por el menor consumo de gas, también se produce menos contaminación al interior de las viviendas, lo cual genera un impacto positivo en la salud de las personas, evitando, por ejemplo, las enfermedades broncopulmonares tan características de la época invernal. ¿Qué otros avances ha habido en este tema? La Segunda Etapa de Reglamentación Térmica de la Vivienda incorpora exigencias térmicas para pisos ventilados, muros y ventanas (la primera etapa consideró el sistema de techumbre), entre otros, que apuntan a mejorar el estándar de calefacción al interior de las viviendas. Cabe destacar que estos estándares han sido consensuados con los principales actores del sector local, y nos permitirán lograr niveles similares a los de países desarrollados. Los plazos para cumplir con estas expectativas y lograr una legislación de alto nivel, apuntan a cerca de una década más, tomando en cuenta que en Europa, los países han tardado entre diez y quince años en lograr resultados concretos en esta materia. ¿Cómo marcha la entrega de subsidios de acondicionamiento térmico entre O´Higgins y Aysén? Se ha logrado una muy buena demanda en todas las regiones. Hay que explicar que tenemos dos vías de intervención. Un subsidio apunta a reconvertir el parque actual de viviendas, construidas antes de la reglamentación térmica, a fin de que puedan incorporar estas mejorías y cumplir las exigencias de la normativa. El otro se enfoca a viviendas nuevas, y busca generar estándares por sobre lo que establece la norma, que incluso lo hemos llamado "subsidio súper térmico". En el caso del primer subsidio, durante 2009 contamos con un programa que superó los 9 mil subsidios y para 2010, bordeará los 10.000. En el caso de las viviendas nuevas, llevaremos a cabo una evaluación del ahorro energético de las actuales viviendas pilotos y establecer así un régimen de subsidios anual. ¿Qué avance tiene el tema de la certificación de eficiencia energética para todo tipo de construcciones? Antes de establecer una certificación propiamente tal en esta materia, el Gobierno está evaluando incorporar una serie de requisitos y exigencias de confort térmico para edificios que no constituyen viviendas, por ejemplo, oficinas y colegios, ya que la normativa actual sólo se aplica a las viviendas. Respecto de la certificación energética, esta se aplicará en una primera etapa, y en forma voluntaria, sólo a edificaciones destinadas a viviendas, casas o departamentos. Esta certificación esperamos tenerla en pleno régimen a partir del primer semestre de 2010, previa instauración de fases pilotos en Santiago a principios de año. ¿Qué aporte reviste la ley que establece una franquicia tributaria para instalar paneles termo-solares en hogares? Recientemente fue promulgada esta ley y establece la franquicia para hogares de hasta 4.500 UF, iniciativa que debería estar operativa los primeros meses de 2010. En un contexto en que en nuestro país el uso de energía solar en el sector inmobiliario es incipiente, este beneficio tributario es una oportunidad para avanzar en este tema, esperándose que durante los primeros cinco años, según la proyección de la CNE, unas 300.000 viviendas se acojan a esta franquicia. Básicamente, esta ley favorecerá directamente a empresas constructoras e inmobiliarias, pues les permitirá ponerse a la altura de países más desarrollados en este tema, contribuyendo a la materialización de proyectos más sustentables. En total, el Estado proyecta invertir cerca de US$ 240 millones en este programa, colaborando con el cuidado del medioambiente. ¿Considera usted que la eficiencia energética es hoy un tema país? Efectivamente. Creo que hoy está en la discusión nacional que la EE es un elemento que agrega valor a las construcciones y que mejora la calidad de vida, de salud y la situación económica de muchas familias. Este un tema que se puso en carpeta ya en la década de los 90, convocando paulatinamente a todos los sectores, y hoy se ha establecido como un tema permanente. Hemos generado mecanismo y herramientas concretas, además de programas de financiamiento anuales. A nivel ciudadano, se ha ido instalando poco a poco, y la gente está cada vez más consciente que estas soluciones implican ahorros significativos. Por ejemplo, hemos entregado ampolletas de EE en programas sociales para que las personas conozcan sus beneficios y así vayan haciéndose partícipes de esta lógica. |