A juicio del Profesor Emérito del Departamento de Ingeniería Estructural y Geotécnica de la Universidad Católica, Carl Lüders, “una de las principales ventajas de los prefabricados de hormigón radica en la calidad de los elementos y la precisión con la que se hacen, de manera que se logra mayor seguridad en cuanto al producto terminado”.
En efecto, al ser elaborados en serie en una fábrica, es decir, en un ambiente controlado, para luego ser trasladados y montados in situ, la calidad del producto resultante es mayor. “Desde el punto de vista estructural, existe seguridad de que los elementos se construyen en forma correcta”, explica Lüders.
Mayor velocidad de ejecución
El ingeniero civil PUC añade que, en términos económicos, otra ventaja importante de los prefabricados de hormigón es que permiten una mayor velocidad en los tiempos de ejecución. “Mientras se están haciendo las fundaciones, ya se está efectuando la estructura, entonces, naturalmente, los tiempos se acortan muchísimo”, afirma.
Complementando lo anterior, el ingeniero civil de la Universidad de Chile, Alfonso Larraín Vial, señala, a modo de ejemplo que “en el edificio Titanium, en que teníamos casi todas las losas prefabricadas, lográbamos hacer un piso cada siete días, lo que habría sido imposible de hacer con sistemas tradicionales”.
El ejecutivo de Larraín Vial y Asociados agrega que otra ventaja de los prefabricados de hormigón es que hay mucho ahorro de pérdidas de materiales de escombros. “Muchas veces está la idea de que hacer prefabricados es un poco más caro, pero sacando bien las cuentas normalmente no es así”, declara.
Augusto Holmberg, Gerente General del Instituto del Cemento y Hormigón de Chile, ICH, sostiene que “otras ventajas de los prefabricados, por el lado del comportamiento, tienen que ver con su durabilidad, resistencia al fuego y solidez sísmica, que lo hacen muy adecuado”.
Añade que, además, permiten reducir la cantidad de gente en obra, los gastos generales y los riesgos de accidentes. A lo anterior se suma el aporte al cuidado del medioambiente, al tratarse de sistemas donde la gestión de los residuos generados es más eficaz.
El desafío de un mayor uso
En materia de logros, Augusto Holmberg destaca que la utilización de los prefabricados de hormigón está consolidada en aplicaciones como construcción de puentes y naves industriales, en tanto que se observa un interés creciente en casas y edificación de media altura e incluso en altura. En este sentido, cita como ejemplos emblemáticos, las casas prefabricadas que está haciendo BauMax con Inmobiliaria Manquehue y lo que está realizando Momenta en edificación de mediana altura.
Respecto de este tema, Carl Lüders destaca la moderna planta de construcción robotizada en hormigón, que BauMax posee en Lampa. “Hay un programa que define la posición de cada una de las barras y el robot las coloca de manera exacta en la posición correcta, sin necesidad de instruir a los operarios de colocarlas en la forma que corresponde”, detalla.
No obstante lo anterior, aún no se observa un uso masivo de estos sistemas. En opinión del ingeniero civil PUC puede incidir en ello el hecho de que requieren de un diseño previo bastante cuidadoso que toma cierto tiempo, pero luego el sistema es muy eficiente. Agrega que para un mayor uso de los prefabricados de hormigón la gente debe dejar de ser reacia al cambio y aprender a innovar.
Por su parte, Alfonso Larraín Vial indica que también puede influir que aún no exista un uso masivo el hecho de que en Chile la mano de obra es más barata que en otras partes del mundo, lo que debería ir cambiando.
Augusto Holmberg señala que las condiciones están dadas para que se vaya generando un mayor uso.
“Hoy las presiones de tiempo son mayores; terminar una obra un par de meses antes no solo tiene un impacto económico sino que también desde el punto de vista de los riesgos que asume quien está en obra”, explica.
El Gerente General del ICH agrega que también hay ciertas presiones referidas a la calidad de la mano de obra. “Después de la crisis de 2008 hubo bastante rotación de la mano de obra; salió mucha gente especializada del área construcción y hoy está ingresando gente con menos capacitación, por lo que todo indica que deberíamos tender a contar con menos gente en obra, más especializada y eso es posible con el uso de elementos prefabricados”, afirma.
Augusto Holmberg enfatiza que es importante difundir las numerosas ventajas que poseen los prefabricados de hormigón. Es en este contexto que recientemente tuvo lugar en el auditorio de la Cámara Chilena de la Construcción el seminario internacional “Tecnología aplicada al Prefabricado mediante diseño de conexiones según ACI 318 – Experiencias en Japón y EE.UU.”
El seminario mostró la experiencia en el uso del prefabricado en distintas áreas sísmicas del mundo, siendo uno de los temas centrales el uso de algunos dispositivos especiales para simplicar la construcción con este sistema: los conectores.
Al respecto, Holmberg concluye que “creemos que la incorporación de innovaciones tecnológicas, nuevos productos y materiales que nos ayuden a simplificar la construcción, hacerla más segura, y que nos permitan aprovechar las buenas experiencias en el extranjero es lo que hoy necesitamos en muchas áreas”.