Si bien la preocupación por el cuidado por el medioambiente es importante, no es suficiente. Así lo revela el reciente estudio desarrollado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), pues las ciudades de nuestro país padecen de un déficit de áreas verdes. Escenario a revertir La OCDE concluyó que los chilenos disponemos de sólo 4,1 m² de áreas verdes por persona, cuando la recomendación de la Organización Mundial de la Salud es de 9 m² por habitante. Estudios como éste plantean un desafío significativo a la industria inmobiliaria, que implica construir no sólo viviendas, sino entornos amigables con la calidad de vida de quienes las habitan. El acceso a espacios que comprendan metros cuadrados de naturaleza se hace indispensable, más aún cuando el parque automotor crece a pasos agigantados. Según el mismo estudio, el Gran Santiago cuenta con apenas 3,46 m² de áreas verdes por persona. Por cierto que los cambios se desarrollarán paulatinamente. Pero una forma de avanzar es promoviendo el uso racional de los recursos en los inmuebles, a su vez que se desarrollan espacios para la vida sana y el deporte. En ese sentido, es indispensable que todos los actores de la industria inmobiliaria incorporen innovaciones tecnológicas en favor de lo expuesto. El resguardo del medioambiente no es sólo un problema de las autoridades, requiere la atención de todos. El sector puede y debe ser protagonista de primer orden. Recordemos que la protección del medioambiente debe partir por casa, maximizando sus beneficios de habitabilidad y vida saludable. A considerar Sin que nadie lo exija, ¿por qué no incluir Puntos Verdes en los edificios? ¿O crear espacios inteligentes acorde a la vida urbana, como más metros para estacionar bicicletas y disponer de bicicletas para favorecer su uso como medio de transporte en la ciudad? Es hora de abordar el desafío. | Apoquindo Downtown. | A modo de ejemplo, Ralei Grupo Inmobiliario promueve la vida sana en su nuevo proyecto Apoquindo Downtown. El edificio tendrá una pista de trote en la azotea con vista panorámica, ya que se encuentra en el piso 12. Tiene un circuito aproximado de 70 m alrededor de una zona verde, ideal para la práctica de este deporte al aire libre. Esta moderna e innovadora pista contará con una superficie de maicillo, material que además de favorecer el rebote, evita lesiones, condición que la hace muy superior al hormigón y el asfalto. Además, contará con zonas de escaños, ideales para elongar o, simplemente, descansar. Este circuito contará con iluminación nocturna, lo que facilitará la práctica de este ejercicio a toda hora. La pista de trote tiene contemplado barandas de acero para favorecer la ventilación, las que al mismo tiempo ofrecen mayor resguardo que las de cristal. |