Jorge Torres Z., Jefe de Ingeniería Sonoflex Chile, señala que con la ayuda de regulaciones y una mayor conciencia social se han disminuido las principales fuentes de ruido del ambiente exterior mediante un mayor control de las mismas y fachadas más sólidas acústicamente y con menos fugas de ruido. Dichas mejoras han permitido que otros ruidos, que antes eran enmascarados por ruidos exteriores de mayor nivel, aparezcan claramente provocando molestias a los residentes. Entre estos ruidos están los provenientes de áreas comunes en edificios, como pasillos, halls, terrazas, escaleras, ascensores, salas de máquinas y calderas; y los originados en otros departamentos como pisadas, caídas de objetos y sonidos como televisores, radios y conversaciones. Hoy, el D.S. Nº 47 Ordenanza General de Urbanismo y Construcción establece que los elementos constructivos horizontales, como pisos, deberán presentar un nivel de presión sonora de impacto normalizado máximo de 75 dB. Para alcanzar y mejorar este nivel, sin tener que utilizar mayor cantidad de material y/o aumentar el espesor de una losa de concreto, es posible usar una membrana de polietileno químicamente reticulado con densidad 30 kg/m³ y espesor 5 mm, tipo IMPACTODAN. Al utilizarla entre una losa de concreto de 16 cm y una sobrelosa de mortero de 50 mm de espesor se puede alcanzar un nivel de presión acústica impacto normalizado de 59 dB y un índice de reducción acústica de 53 dB(A). |