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De acuerdo con un estudio de Hornetsecurity, un 26% de las organizaciones no proporciona formación en ciberseguridad a sus empleados y menos del 8% ofrece formación adaptativa capaz de evolucionar según los resultados de pruebas regulares.
La investigación reveló que un 39% de los encuestados asegura que la formación que imparten no cubre adecuadamente las amenazas recientes o aquellas impulsadas por la tecnología de inteligencia artificial (IA).
Además, un 52% de las empresas asegura que los empleados suelen ignorar o eliminar las amenazas de correo electrónico sin notificarlas.
“Los empleados deben estar equipados con formación continua para reforzar cualquier defensa técnica y servir como un cortafuegos humano. Esa constancia es esencial para que la formación tenga el mayor impacto”, explica Daniel Blank, COO de Hornetsecurity.
“Es importante contar con la última tecnología de ciberseguridad, pero una cultura de seguridad sostenible también significa invertir en las personas”, indica el experto.
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