A medida que comienza el 2025, reflexionamos sobre el trabajo realizado, y muchas personas comienzan a considerar cambios en sus carreras. Sin embargo, los últimos años han sido excepcionalmente impredecibles en el mercado laboral para desarrolladores, y 2025 no parece ser diferente.
1. Una meseta en las contrataciones
Aunque el mercado laboral para los profesionales de tecnología muestra importantes señales de vida en 2025, no se espera un retorno inmediato a los niveles de crecimiento previos.
En la Región, la demanda por talento en estos cargos se mantiene alta, pero con un enfoque más prudente en la asignación de recursos. “Los presupuestos de contratación se están desbloqueando y los proyectos están tomando impulso. Sin embargo, las empresas están siendo más selectivas, priorizando la calidad sobre la cantidad en sus contrataciones”, comenta Daniela Melo, Manager IT en Robert Walters Chile.
2. Salarios estancados
El crecimiento moderado del mercado probablemente no se traduzca en aumentos salariales significativos para los ingenieros. “No vemos cambios drásticos en los salarios en comparación con los últimos años. Aún persiste un efecto de resaca del auge de contrataciones posterior a la pandemia”, agrega Melo.
El mercado laboral está favoreciendo a las empresas, lo que reduce el margen de negociación salarial o de beneficios como opciones de acciones. Los ingenieros que mejor se posicionen serán aquellos que demuestren habilidades para colaborar con las áreas comerciales de sus organizaciones.
3. Contratación silenciosa y evolución de habilidades
Con el avance de tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y la ciberseguridad, las empresas en la Región están ajustando sus prioridades de contratación para cubrir estas capacidades específicas. Melo indica que “el conocimiento en ingeniería de prompts, el uso estratégico de IA y la capacidad de comprender su impacto comercial son habilidades altamente valoradas en el mercado actual”.
Además, la “contratación silenciosa” seguirá siendo una estrategia popular, donde los profesionales de tecnología existentes son reasignados o capacitados para asumir nuevas responsabilidades. Esto se complementa con esfuerzos crecientes de upskilling para abordar brechas específicas en las capacidades de los equipos.
4. Procesos de selección más exigentes
La proliferación de herramientas de IA ha complicado los procesos de selección, ya que los reclutadores reciben currículums optimizados que superan filtros tradicionales. Para contrarrestar esto, las empresas están implementando más etapas de evaluación, como pruebas técnicas y entrevistas adicionales.
Sin embargo, Melo advierte que procesos excesivamente largos pueden desmotivar a los candidatos. “Las empresas que sean rápidas y decisivas tendrán más probabilidades de captar a los mejores talentos, especialmente en un mercado tan competitivo como el chileno”, indica.
5. Tendencias organizacionales: menos jerarquías
Una tendencia a observar es el “gran aplanamiento”, donde se reduce la gestión intermedia y los ingenieros y desarrolladores se involucran más en tareas prácticas. En paralelo, Melo explica que “las nuevas generaciones de profesionales están priorizando el desarrollo de habilidades por sobre los ascensos jerárquicos, lo que lleva a un enfoque más colaborativo y basado en equipos”.
6. El inevitable retorno a las oficinas
El regreso a la presencialidad es otra realidad para los profesionales de tecnología en 2025. “Muchos de nuestros clientes en Chile están solicitando explícitamente la presencia en oficina, especialmente para roles estratégicos”, señala Melo.
Un aspecto positivo es que las empresas están dispuestas a ajustar salarios para aquellos que trabajen presencialmente más días a la semana, lo que puede ser un incentivo adicional.