Desde hace ya algunos años aparecieron dos modelos de impresoras 3D para el hogar (en EE.UU y el Reino Unido), con un precio que bordea los mil dólares. Uno de estos pioneros modelos de impresoras 3D utiliza un software libre (RepRap) que permitió a otros fabricantes ingresar al mercado de la impresión 3D y entregar una ingente variedad de impresoras de baja escala. Sin más, el fabricante TechRepublic ya ha lanzado 10 impresoras que permiten la fabricación de piezas. Los usos de las impresoras 3D Los mayores usos que se les da a las impresoras 3D es la matricería y la prefabricación de piezas o componentes, y los sectores donde más son utilizadas es la arquitectura y el diseño industrial. Una de las industrias donde más se utilizan son los proveedores de prótesis médicas, ya que se logra aprovechar la gran versatilidad de estas impresoras para fabricar piezas únicas para cada paciente. Estas impresoras trabajan en tres formas: a través de la compactación de polvo, la adición y la inyección de polímeros. La compactación y la adición son tecnologías propias de las impresoras 3D de alto nivel, mientras que la inyección de polímeros se ve preferentemente en los modelos de menor nivel. Ya sea por compactación, adición o inyección. Los objetos pueden tener varios colores en su fabricación, ya sea a través de la incorporación de tintes a las impresoras de compactación o al uso de polímeros de distintos colores durante la inyección. Impresoras 3D de tinta: Utilizan una tinta aglomerante para compactar el polvo. El uso de una tinta permite la impresión en diferentes colores. Impresoras 3D láser: Un láser transfiere energía al polvo haciendo que se polimerice. Después se sumerge en un líquido que hace que las zonas polimerizadas se solidifiquen. El proyecto RepRap Fue justamente una impresora 3D la máquina elegida para representar la quimera del proyecto RepRap (Replicante Rápido de Prototipos). Esta iniciativa nace el 2005 en la Universidad de Bath en el Reino Unido, y plantea que es posible crear una máquina capaz de reproducirse a sí misma. Esto se logró gracias a que la mayor parte de las partes de la impresora RepRap original son plásticas, y son perfectamente fabricables por la misma impresora. RepRap entregó al mundo del diseño industrial el prototipo y las licencias del tipo OpenSource, y por eso se le considera el inicio disruptivo de la fabricación casera de los objetos que el hombre necesitará en el futuro. Características de las impresoras 3D La impresión 3D consiste en la inyección de miles de capas de uno o más materiales plásticos una sobre otra, siguiendo el formato de un diseño digital tridimensional. Como producto final de este apilado automático, se logra reproducir objetos tridimensionales como vasos, lámparas, juguetes, adornos y muchos otros. Una de las principales características de las impresoras 3D es que el proceso de impresión es hoy bastante más complejo que la impresión 2D. Previo a imprimir es necesario seleccionar el material a tallar, el volumen del objeto, escalar el modelo tridimensional para trabajar el tamaño adecuado, todo a través de software especializado. Otro factor es el precio, porque la impresión 3D no es un proceso barato. La materia prima de estas impresoras son materiales filamentosos como el ABS o el Plástico PLA, los que actualmente cuestan cerca de US$70 el kilo. Además, la impresión de un modelo simple (Como por ejemplo, el case de un celular) toma mínimo tres horas. Para generar los modelos 3D digitales, es necesario utilizar software de modelamiento 3D. Afortunadamente, en el mercado existen varios programas gratuitos para el trabajo tridimensional, pero su utilización y correcto manejo requiere un manejo avanzado del PC. Al mismo tiempo, hay sitios webs donde es posible descargar diseños gratuitos de objetos imprimibles. Modelos y sus principales características De los modelos actualmente disponibles en los mercados norteamericanos y europeos, la mayoría logra funcionar sin la necesidad de estar conectados a un computador, ya que los modelos digitales pueden ser obtenidos a través de interfaces USB o SDcard. En la gama de impresoras 3D para el hogar, los precios van desde los US$500 hasta más de US$2 mil. El tamaño del objeto impreso van desde los 14 a los 23 cm³, y la principal característica que utilizan los fabricantes de este periférico es la cantidad de materiales y colores que se pueden utilizar en una sola impresión. Otra característica diferenciadora es qué tan delgada puede imprimir las capas, ya que mientras más finas sean, se hace posible la fabricación de modelos muchísimo más complejos. |