La naviera danesa Moller-Maersk y el operador de portacontenedores Hapag-Lloyd, con sede en Alemania, anunciaron la suspensión de todos los pasos de buques por el Mar Rojo, tras una serie de ataques contra la navegación en la zona.
Maersk dijo estar "profundamente preocupada por la escalada de la situación de seguridad en el sur del Mar Rojo y el Golfo de Adén, que supone una amenaza significativa para la seguridad de la gente de mar".
Los rebeldes Houthi de Yemen se han adjudicado los ataques a petroleros y otros buques comerciales que transitan por el Mar Rojo, en respuesta a la acción militar israelí en Gaza. Anunciaron que impedirán la navegación de todos los barcos que se dirijan a Israel, sin importar su nacionalidad.
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