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Un análisis realizado por la empresa iF Lastmile, llamado “Logística inversa: Desafíos y tendencias 2023”, revela cuáles serán las transformaciones en este ámbito, que consiste en la devolución de un producto desde el cliente hacia el distribuidor.
Según iF Lastmile, los artículos devueltos pueden llegar a representar el 12% de la facturación para algunos e-commerce. Por eso, rotar con rapidez el stock que queda retenido en este proceso es clave para la sostenibilidad económica de las marcas.
Estos son los retos y factores que marcarán el ritmo de la logística inversa este año, de acuerdo al informe de iF Lastmile:
- Fin de las devoluciones gratis: Dado su impacto insostenible para las cuentas de resultados de los comercios, en los próximos meses se impondrán fórmulas como la devolución sin coste limitada a algunos productos, gratuidad solo para cambios o gastos personalizados en función del comprador.
- Sensibilización social: El desperdicio que originan los productos que no se reintegran al canal comercial está adquiriendo dimensiones desproporcionadas. Actualmente, 2 de cada 3 consumidores están dispuestos a pagar más a las marcas que identifican como socialmente responsables.
- Auge de la circularidad: Se desarrollarán fórmulas de ‘recommerce’ para dotar de una segunda vida a la mercancía devuelta a través de su reacondicionamiento, así como soluciones de reciclaje que eviten el desecho incontrolado.
- Inteligencia Artificial: La aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) será clave para segmentar el flujo de la logística inversa mejorando su trazabilidad, aumentando la operatividad de los procesos y reduciendo los costos de envío.
- Enfoque de rentabilidad: Las devoluciones dejan de ser tratadas exclusivamente como un gasto y evolucionan hacia un enfoque de rentabilidad. En su gestión primará el reemplazo de los productos, un conocimiento más profundo del cliente y el diseño de nuevas estrategias de fidelización.
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