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Ante los continuos problemas en las cadenas de suministro que están afectando a la logística del sector retail y de gran consumo, la compañía alemana Lidl ha decidido tomar acciones. Para ello, la empresa registró su propia compañía para el transporte de contenedores, que le ayudará a afrontar los problemas de transporte.
El nuevo operador de la compañía será conocido como Tailwind Shipping Lines. Dicho nombre ya está en proceso de registro ante la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO).
Mediante esta marca, Lidl podrá gestionar una parte importante de sus operaciones de transporte, que actualmente administra mediante diferentes navieras.
El objetivo es poder gestionar el creciente volumen de la producción de todas sus instalaciones de una manera más flexible a largo plazo. Si bien Lidle consideró en algún punto la inversión en navieras ya existentes, finalmente se decidió a crear su propio negocio y comprar sus propios portacontenedores.
Esta nueva empresa incluiría el transporte de mercancías y el transporte marítimo, pero también el transporte aéreo, así como los servicios de handling para importación y exportación.
Con esta nueva medida, Lidl sigue los pasos de otras compañías que han tomado acciones similares, como Amazon, Ikea o Walmart, que últimamente han enviado sus propios buques para mover cargas desde Asia.
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