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Walmart está trabajando en la implantación de docenas de nuevas ubicaciones para sus centros logísticos locales, para facilitar la recogida y entrega de pedidos de sus clientes.
Se trata de almacenes modulares compactos construidos dentro de una tienda o agregados a ella. Además de los artículos frescos y congelados, estos espacios pueden almacenar miles de productos, desde comestibles a electrónica, explica Tom Ward, vicepresidente senior de productos para el cliente de Walmart.
El minorista estadounidense destaca las principales ventajas de esta tecnología, que comenzó a implantarse en su centro de Salem, New Hampshire, a fines de 2019. En primer lugar, sobresale por lograr una mayor disponibilidad (se pueden recoger más pedidos y más rápido); además, la velocidad del sistema permite que los pedidos se recojan o entreguen en una hora; y, finalmente, destaca por ser más eficiente (un centro logístico local puede cumplir con los pedidos de muchas tiendas, lo que significa que los clientes de las tiendas cercanas salen beneficios).
La compañía tiene intención así de construir centros logísticos locales con varios socios tecnológicos, incluidos Alert Innovation, Dematic y Fabric. Y, junto a ellos, probará innovaciones complementarias para ver qué funciona mejor en los diferentes entornos. Así, en algunas ubicaciones, prevé ampliar sus tiendas y en otros entornos estos centros logísticos se situarán dentro de la tienda existente.
Además, en otros establecimientos la cadena agregará puntos de recogida automatizados en los que los clientes sólo tendrán que escanear un código y recoger su pedido.
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