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La asociación France Logistique publicó un documento con siete proposiciones para relanzar la logística francesa tras la crisis sanitaria provocada por el Coronavirus. Así, hoy, Francia se encuentra con dos zonas distintas de confinamiento (roja y verde) y en la más permisiva, la población tiene prohibidos los desplazamientos más allá de un radio de 100 kilómetros a partir de su domicilio. La zona roja tiene unas restricciones más restrictivas y el país vecino supera ya los 17.000 fallecidos.
Cabe recordar que France Logistique se constituyó en enero bajo la Presidencia de Anne-Marie Idrac, una experta en estas lides. Idrac ha ostentado cargos de relevancia política en el sector, puesto que fue Secretaria de Estado de Transportes de 1995 a 1997, en el gobierno de Alain Juppé, diputada de Yvelines, secretaria de Estado de Comercio Exterior de 2008 a 2010. También fue presidenta de RATP (2002-06), trenes de cercanías, y de SNCF (2006-08).
El comunicado califica al sector logístico como “estratégico para nuestra economía” que ha sabido demostrar su papel primordial en el devenir diario de los franceses. Por ello, “es más necesario que nunca preservar su supervivencia para que pueda acompañar la recuperación del conjunto de la economía”. Desde la asociación se asegura que las empresas logísticas “han sufrido un golpe de violencia sin precedentes y están muy debilitadas por la crisis”. Idrac señala que, para que el sector logístico esté a la altura de la reactivación de la actividad económica del país”, debe ser apoyado y acompañado por el Estado. En este sentido, y más allá de los puntos explicados en el comunicado, France Logistique ha solicitado la convocatoria inmediata del Comité Interministerial de la Logística.
El comunicado detalla una serie de medidas a tomar que contemplan varios aspectos relativos a financiación, puertos, vías navegables, aeropuertos, ferrocarril, el medioambiente y los almacenes logísticos.
Los puntos son: Preservar a corto plazo la tesorería de las empresas de la cadena logística; Reforzar la capacidad de adaptación de la cadena de suministro a las necesidades de las empresas en el período de recuperación; Favorecer las actividades de tránsito de los puertos y asegurar su funcionamiento; Recuperar los suministros por flete aéreo; Permitir que el transporte de mercancías por ferrocarril y vías navegables desempeñe plenamente su función; Promover la optimización de la distribución urbana y reducir su huella de carbono; y Fomentar la construcción de almacenes para aumentar la independencia logística.
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