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| Foto Genérica |
Pagos indebidos e irregularidades por alrededor de 85 millones de dólares detectó la Auditoría Superior de la Federación de México en su investigación del proyecto “Nuevo Aeropuerto Internacional de México”, obra que fue cancelada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador en 2018, proyecto estrella de su antecesor, Enrique Peña Nieto, quien apostaba por erigir un nuevo terminal para descongestionar el actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México y dar un renovado impulso al comercio exterior.
En la tercera entrega de auditorías 2018, el organismo estableció 11 irregularidades en las 12 revisiones que efectuó a la obra de la terminal aérea. En consecuencia, el organismo fiscalizador decretó cinco promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria y 10 pliegos de observaciones.
ASF detectó irregularidades en los proyectos ejecutivos del edificio terminal de pasajeros, vialidades de acceso, estacionamientos, Torre de Control, centros de control de operaciones, pistas, rodajes, plataformas y ayudas a la navegación.
Detalló que están pendientes de aclarar el destino de 47 millones de dólares por el acompañamiento arquitectónico de personal en la fase obra que no se acreditó. Además debe aclararse el destino de unos 15 millones de dólares por servicios injustificados que estaban fuera del catálogo original de la obra, así como cálculos incorrectos al presupuesto por alrededor de 10 millones de la divisa estadounidense.
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