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Con una importante y masiva participación, los dirigentes y directores nacionales de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones (CNDC) hicieron un exhaustivo análisis de la contingencia que vive el país y de los efectos que ésta tiene sobre los transportistas de carga. En particular, se debatió sobre el impacto que deben soportar las pymes del sector, que son la mayoría del rubro, al tiempo que manifestaron su preocupación por un descenso en la facturación por servicios de transporte que rondaría, en promedio, el 50%.
Conforme a lo manifestado por la CNDC desde los primeros días de la crisis, los camioneros ratificaron su compromiso de seguir abasteciendo a la comunidad en todas las regiones, y mantener la cadena logística y de suministros. Esto, de forma de permitir que todos los chilenos puedan continuar sus actividades con la mayor normalidad posible.
Al entregar una cuenta sobre las actividades y logros de la Confederación en el presente año, y refiriéndose directamente a la contingencia, el presidente de la CNDC, Juan Araya, expresó: “Hemos estado en todas las reuniones de diálogo y coordinación a que nos ha llamado el gobierno. Nos reunimos con las principales autoridades partiendo por el jefe de Estado, y mantenemos el compromiso adquirido de seguir abasteciendo a todos los sectores productivos”.
Sin embargo, admitió que el clima actual de anormalidad que atraviesa el país tiene efectos sobre los transportistas, “porque el país está trabajando a media máquina, así que entendemos que la situación es muy delicada, pero como gremio debemos estar unidos”.
Finalmente hizo un fuerte llamado al Gobierno, al Congreso y a la Justicia para que, con urgencia, trabajen “en forma responsable y patriótica” para conseguir los acuerdos necesarios que permitan frenar en el más breve plazo la violencia desatada, y así devolver la seguridad a las ciudades y sus habitantes.
Se informó que la facturación de las empresas del transporte sufrió una caída de hasta el 50%. La cifra fue transparentada en el reciente Consultivo de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones de Chile.
La preocupación es manifiesta, según el gremio, porque los transportistas movilizan el 95% de las mercancías a lo largo del país, en todos los rubros de la cadena productiva y logística. En Chile hay 40.000 empresas, con un 98% de participación de pymes del transporte, las más afectadas por la falta de capital de trabajo que trae consigo la baja en las facturaciones.
Entre los factores que explican la caída, todos generados por la crisis social y la dura contingencia que vive el país, se cuentan la reducción y acortamientos forzosos de las jornadas de trabajo de los clientes; los paros en diversos sectores productivos que impiden la normalidad de los tráficos origen-destino (operación de puertos, centrales de bodegaje y almacenamiento, retailers y otros); y cortes de carretera y barricadas por turbas, tanto en Santiago como en regiones.
Si bien la preocupación general es mantener la cadena logística, los delegados que hicieron el análisis en la actual contingencia advierten que la falta de seguridad y la acción de bandas delictuales, son los problemas más graves.
Otro punto de preocupación es el dólar, por su fuerte escalada alcista. En el transporte terrestre impactará en los insumos para generar servicios de despacho: combustibles, lubricantes, repuestos y otros ítems. Como el precio de los camiones y equipos depende del dólar, se prevé un impacto en la renovación de flotas, ante la incertidumbre de la situación actual.
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