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Ball Corporation anunció que aumentará la capacidad de producción de su planta en Santiago, agregando un volumen de 400 millones de latas al año y aumentando así la capacidad existente. La inversión permitirá a la compañía prestar un mejor servicio al mercado local y satisfacer las demandas de latas de 16oz principalmente. La nueva línea de producción estará operativa en el segundo semestre de 2019.
“La economía está creciendo y la demanda de envases de bebidas de aluminio está aumentando en Sudamérica en general, a medida que más personas eligen esta mejor solución de envase y más clientes están prefiriendo las latas de aluminio por su sustentabilidad y por su infinito proceso de reciclado ", dijo Carlos Pires, Presidente de Ball Envases para Bebidas América del Sur.
La última gran inversión en Chile se realizó cuando la planta lanzó su segunda línea de producción, que en ese momento estaba destinada a servir a los mercados de Chile, Perú y Bolivia y presentar su variado portafolio de tamaños y tecnologías para esos países. Además de las latas de 16oz, la planta también produce las de tamaño de 12 oz.
Confirmando el crecimiento del mercado y de la compañía en la región de América del Sur, como se explicó previamente, Ball Corporation también construirá una planta de latas y tapas para bebidas en Asunción, Paraguay, y para fines de 2019, una nueva línea de producción en su planta en Argentina. De esta manera, la compañía podrá satisfacer la fuerte demanda de los clientes directamente, suministrando una variedad de tamaños de latas.
La lata de aluminio es el envase más sustentable y más reutilizado del mundo, con una tasa de reciclaje del 69%, según un estudio realizado por Resource Recycling Systems. Hoy, el 75% de todo el aluminio que se produce está aún en circulación. Es por eso que las latas son un envase liviano, compacto y resistente, fácil de llevar a cualquier lugar para su consumo, como una fiesta o un partido de fútbol. Se enfría más rápido que cualquier otro envase, lo que ahorra energía significativamente. El aluminio también puede proteger el producto del daño físico, de los efectos del oxígeno y otros elementos, manteniendo la integridad, el valor nutricional y el sabor original de sus contenidos.
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