Potenciar la industria de alimentos -uno de los cinco cluster de nuestra economía- a través de la innovación para alcanzar mayores índices de competitividad, fue el principal motor que dio vida al Primer Concurso de Diseño e Innovación "EnVase a Chile", organizado por la División de Innovación del Ministerio de Economía. Y es que, como indica Orlando Jiménez, máximo ejecutivo de esta área, la motivación surge de la preocupación más esencial y fundamental que tiene el Gobierno en el ámbito de promover la innovación, que se traduce en cómo -a partir de lo que tenemos y lo que somos- podemos ser más competitivos.

Como asegura Jiménez, la evidencia empírica indica que para un mismo producto, un envoltorio especial, versus un empaque commodity, hace una diferencia fundamental. "En la industria del vino, por ejemplo, una botella puede comercializarse al doble de su precio, sólo por el envase. Otro ejemplo es el de la empresa Invertec, que creó un embalaje funcional que permitía que el filete de salmón se introdujera en el mismo envoltorio al microondas y estuviera listo para consumir en 3 minutos. Gracias a esta innovación, el mismo producto que antes vendían congelado en una bandeja, hoy se vende a 3 ó 4 veces su valor, sólo porque cambió de envase, lo que apenas incrementó el costo de empaque en 30%".

Las mejores ideas

De los 180 trabajos recibidos, los diseños premiados fueron 10: un primer lugar, dos segundos lugares y siete menciones honrosas. El jurado a cargo de seleccionar las maquetas estuvo compuesto por reconocidas ejecutivos de gobierno y de la industria, además de destacadas autoridades del mundo del diseño nacional e internacional. Entre otros, Gonzalo Castillo, Diseñador de la PUCV y Presidente de la Asociación Chilena de Empresas de Diseño, QVID; Carlos Hinrichsen, Diseñador Industrial, Master of Engineering en Japón y Consultor Internacional de Diseño; Kyung – Won Chung, Diseñador Industrial y Master en Diseño Industrial de la Universidad de Syracuse, EE.UU; junto a Venancio Arquilla, Diseñador e Investigador del Departamento INDACO, del Politécnico de Milano, en Italia.

La idea ganadora fue un envase para paltas, que dispone cuatro unidades en un empaque que permite que maduren más rápidamente y tiene la ventaja de colgarse. Los segundos lugares fueron un packaging para erizos y otro de patés marinos, y las menciones honrosas se repartieron entre un innovador sachet con figuras de cochayuyo -Lolyuyo- envases para merquén, especias y un sistema que permite dejar fija la bolsa de té en el borde de la taza y estrujarla con un cartón, para dejar atrás la costumbre de darle vueltas con la cuchara.

El primer lugar recibió $2,5 millones y los segundos lugares $500.000, además de una asesoría de patentamiento a cargo de la empresa Clarke, Modet & C° Chile. Asimismo, los tres primeros lugares junto a las siete menciones honrosas, fueron premiados con una asesoría especializada para que postulen al instrumento de Innovación Empresarial Fast Track de Innova Chile.

Universidad y empresa: Un solo mundo

El desafío de "EnVase a Chile" fue generar espacios para que las escuelas de diseño dieran señales nítidas y categóricas a sus estudiantes respecto a la necesidad urgente de vincular su trabajo y sus ideas con las necesidades productivas del país. Por eso el requisito para participar era presentar un proyecto en alianza con la empresa privada.

"Y la respuesta fue positiva y sorprendente. Desde el mundo del diseño nos han dicho en varias oportunidades que esta es la primera vez que se les reconoce, desde la política económica, el rol que cumplían. Asimismo, la acogida del mundo empresarial fue fantástica: participaron 24 destacadas empresas -pequeñas, medianas y grandes- y tres asociaciones. Esta acogida sólo nos confirma que este es un fenómeno que hay que atender, para que crezca y de frutos", afirma.

Para el Ministerio de Economía, "EnVase a Chile" ha permitido reforzar -concretamente- el vínculo entre el mundo de la universidad y la empresa, a través de un instrumento simple pero efectivo, como este concurso. Como indica Orlando Jiménez, esta respuesta es el mejor indicio que es posible generar un movimiento país en esta dirección, donde el mundo de la empresa privada y la universidad, tan distantes durante tanto tiempo, formen uno solo.

Para una próxima versión, la División de Innovación del Ministerio de Economía espera trabajar en alianza con el mundo productivo, donde estén presentes representantes de organismos como la SOFOFA, alguna asociación gremial de diseñadores y escuelas de diseño, por ejemplo, de manera de darle una cobertura mayor a esta iniciativa. Según Orlando Jiménez, "esta primera experiencia ha sido tan impresionante, que incluso llegaron varias propuestas de diseñadores del extranjero que querían postular. Y eso sólo nos demuestra que la veta por explorar en envases innovadores para alimentos es enorme".