En un período difícil como fue el 2009, la industria logística tuvo avances y retrocesos. Sin duda, para Luis Miranda, Gerente General de la Asociación de Transporte Expreso de Chile, ATREX, el año pasado tuvieron lugar procesos de transformación en los procesos aduaneros, lo que culminó en la articulación de un modelo operacional que hoy permite la salida de mercancías que no afectan los tiempos de tránsito en los envíos expresos. "Esto, como consecuencia de un trabajo público-privado mancomunado, que agilizó los procesos de fiscalización, tomando en cuenta las particularidades y especificidades del transporte expreso internacional. Ello derivó en el diseño de procedimientos eficientes y eficaces, que permiten al Servicio Nacional de Aduanas mejorar la calidad y cantidad de información relacionada con el tipo de envíos transportados, y fiscalizándolos mejor y más rápido", explica.

Luis Miranda, Gerente General de ATREX.

Julio Villalobos, Presidente de CHILETRANS- PORTE.

Juan Pablo Fuentes, Director Instituto de Logística y Transporte de Chile, ILT.

Durante la crisis, el desarrollo de la industria logística continuó, con énfasis en la productividad y el control de costos. A juicio de Julio Villalobos, Presidente de ChileTransporte, el sector se vio fortalecido gracias a que la eficiencia se tornó primordial, confirmando así el principio que la logística bien estructurada y ejecutada permite a las empresas mejorar su rentabilidad y acceder de forma eficiente a los mercados.

A juicio de Juan Pablo Fuentes, Director Instituto de Logística y Transporte de Chile, ILT, y Director del Centro Logístico Tecnológico, CLT, un avance muy importante dentro de la industria logística es la creciente importancia dada a la especialización y profesionalización de los recursos humanos, donde hay una toma de conciencia del estatus estratégico de contar con personal calificado laboralmente, en procesos que requieren de especialización y que son fuente de genuina ventaja competitiva.

De acuerdo a la opinión del máximo ejecutivo de ChileTransporte, algunos hitos importantes fueron la creación de un Consejo de Innovación y la constitución -dentro de la SOFOFA- de un Comité de Logística, para construir una visión común e integral de los desafíos que existen respecto de las barreras para mejorar la accesibilidad a clientes y mercados.

En la otra vereda, el retroceso de la industria durante el 2009 tuvo que ver con la postergación de proyectos de inversión, que desencadenaron una disminución en la dinámica de crecimiento de los proveedores de servicios logísticos y en la contracción de los proyectos de inversión en tecnología, demorando los avances necesarios para una gestión logística superior. Según Julio Villalobos, "otro ámbito de retraso fueron las iniciativas legales del 2009 que, a partir del profundo desconocimiento del sector del transporte, por una parte, distorsionaron más la estructura tributaria por medio del error de definir una recuperación segmentada del Impuesto Específico al Diésel, y, en segundo lugar, diseñaron y definieron procesos de control horario de conductores manuales que burocratizan la gestión y dificultan las relaciones laborales".

Recuperación en marcha

Los marcadores de tendencia de la economía internacional están enviando señales claras de recuperación. Para Juan Pablo Fuentes, ante este escenario, y observando el aumento del consumo a fines del 2009 y principios del 2010, sumado a la flexibilización del acceso al crédito, importantes proyectos inmobiliarios y de infraestructura, deberían reactivarse durante el primer semestre de este año.

En lo que respecta al nivel de actividad, el año 2010 comenzó con un incremento en los volúmenes transportados del orden de un 10% a 15% respecto de enero de 2009, lo que en opinión del Presidente de ChileTransporte hace preveer que la recuperación se encuentra en marcha, aunque señala la necesidad de ser prudentes respecto de los sectores que continúan fuertemente afectados, como la industria maderera y salmonicultura. "No hay que olvidar que el transporte y los servicios logísticos son de demanda derivada, es decir, responden a la evolución que tengan diversos sectores primarios de la economía y, afortunadamente, en ese sentido, las proyecciones en general son positivas, y se resumen en un PIB estimado para 2010 de un 5% aproximadamente", puntualiza.

De acuerdo al representante de ATREX, las cifras alcanzadas durante el último trimestre del año pasado hablan de un claro proceso de aumento en el número de envíos, que comenzó a detectarse ya en julio pasado. Y a pesar que durante las últimas semanas se ha observado un relativo estancamiento -como consecuencia del duro invierno que ha afectado a los países europeos y a la zona Este de Estados Unidos- aún cuando la situación económica mundial presenta indicadores de claro repunte, se estima que el proceso de recuperación será lento. "Sin embargo, en la industria existe el claro convencimiento que una vez pasadas las turbulencias de esta crisis, la economía mundial retomará su impulso de crecimiento en donde el comercio internacional seguirá siendo el motor principal y, con ello, la industria del transporte expreso asume su rol facilitador e impulsor del comercio", afirma.

Nuevo Gobierno: Mucho por hacer

Con la entrada del nuevo Gobierno se ponen en la mesa nuevos desafíos que cumplir. Respecto a las prioridades de la nueva administración, lo primero, según Julio Villalobos, es contar con la visión y voluntad de situar al transporte de carga y a la logística en un plano estratégico, para mejorar la productividad de las empresas y el país. Según explica, no hay dudas que las posibilidades de crecimiento y desarrollo de un país y sus empresas se ven incrementadas si se logra alcanzar estándares superiores en los procesos y servicios logísticos, pero para ello es prioritario tener una visión integral respecto de la infraestructura, servicios públicos que participan de las cadenas, los distintos modos y el rol de generadores y clientes.

Para abordar seriamente las posibilidades de apurar el desarrollo de esta industria en el país, se requiere, según el profesional, de una institucionalidad que se haga cargo de este sector con una visión integral y de largo plazo, apuntando a cerrar las brechas que, en este campo, nuestro país posee respecto de economías de alta productividad. "En lo inmediato, lo primero es corregir el enorme error cometido el año pasado con la recuperación segmentada del Impuesto Específico al Diésel y, en segundo lugar, mejorar y hacer las correcciones para la aplicabilidad a las particularidades de esta industria del Sistema de Control Horario de Conductores", indica.

Para Luis Miranda, resulta fundamental que el nuevo gobierno impulse iniciativas orientadas a complementar los enormes avances alcanzados en materia de tratados de libre comercio por nuestro país, lo que significa avanzar en la creación de instancias coordinadoras a nivel de todos los organismos de frontera involucrados en el control y fiscalización de los envíos que salen y entran al país.

En materia de inversiones la tarea es ardua, pero los beneficios son evidentes. Como explica el Director del ILT y CLT, las zonas que presentan el mayor potencial en términos de operaciones logísticas de comercio exterior son sin duda las regiones XV de Arica y Parinacota, la I Región de Atacama y la II Región de Antofagasta, cuyos puertos e infraestructuras y servicios complementarios deben prepararse para competir con Perú por la carga que crecientemente proviene del oriente de Bolivia y del interior de Brasil; macro zona productora de alimentos (soya y carne, entre otras) y productos naturales (madera y cueros), que demandarán los mercados asiáticos (China principalmente) y que actualmente salen por el atlántico a través de las hidrovías que suponen mayores demoras y costos logísticos. "El Gobierno debe tomar conciencia de la importancia estratégica y económica (desarrollo sustentable) que significa transformar el Norte Grande en una plataforma de servicios logísticos para el interior de Sudamérica, y que ésta es una carrera en la que no estamos solos ya que Perú tiene idénticas e incluso mejores posibilidades geográficas de ofrecer sus servicios. Si bien contamos con una situación inicial favorable, debido principalmente a nuestro prestigio como país y a un régimen institucional estable, ésta es una situación transitoria que debe aprovecharse oportunamente", asegura.

A juicio de Luis Miranda, además de grandes potencialidades en la Zona Norte (Arica, Iquique y Antofagasta) para el comercio con el sur de Brasil, Perú, Bolivia y el Norte Argentino, existen grandes oportunidades en la Zona Central, donde se requiere actuar como centro logístico para el movimiento intermodal Marítimo-Terrestre-Aéreo con conexiones a Argentina y vía aérea con todos los principales centro de negocio de la Región. En Punta Arenas, en tanto, el objetivo es ser más eficientes para atender la zona sur de Chile y Argentina.

Los desafíos del 2010

Para quienes participan de la industria de los servicios logísticos, los principales desafíos son mejorar la productividad, fortalecer la integración en las cadenas en que participan, responder a las cambiantes condiciones del comercio global y construir servicios logísticos especializados y flexibles, a fin de alinear la logística a los requisitos del cliente final. A juicio de Julio Villalobos, a nivel general se trata de apurar el proceso de profesionalización a través de la inversión en infraestructura de segunda generación, tecnología y mejora de las competencias de los recursos humanos que trabajan en esta industria, pero a nivel particular el desafío es la innovación, tanto en los modelos de negocio como en la ejecución de sus procesos para incrementar su calidad y disminuir los costos.

Asimismo, para Luis Miranda, el gran reto se relaciona con la construcción del nuevo Recinto Aduanero para el Transporte Expreso, a través del que será posible hacer más eficiente las tareas de importación y exportación de mercancías. Otro desafío importante, según plantea el ejecutivo de ATREX, es avanzar en la obtención de una nueva Ley de Aduanas, que contemple las especificidades y particularidades del transporte expreso internacional.

Sin embargo, para Juan Pablo Fuentes, la tarea primordial es entender a la logística como un motor fundamental en la competitividad de la cadena de suministros de comercio exterior y diseñar un plan estratégico maestro para las regiones I, II y XV, con el objetivo de construir una zona de servicios logísticos que compita por la carga del interior del continente. Para lograrlo, según señala, se requiere una instancia colaborativa permanente de trabajo público-privada y multisectorial, que permita construir una estrategia país de largo plazo, que considere las inversiones en infraestructuras necesarias, la revisión y actualización de leyes y reglamentos, el desarrollo de buenas prácticas que permitan la certificación de procesos logísticos de COMEX, el fomento de la innovación y el uso de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones en los procesos logísticos, entre otras iniciativas.