Aunque el transportista tiene responsabilidad por cualquier daño que le ocurra a la carga mientras la esté trasladando, existe consenso entre nuestros entrevistados acerca de la necesidad de que el consignatario se proteja y contrate su propia póliza, tanto si se trata de una importación como de una exportación. Además, como explica Felipe Risopatrón García Huidobro, Gerente División Transporte de Conosur Seguros & Reaseguros, "es importante que el consignatario exija también al transportista tener su póliza para que, en el caso de un siniestro, sea la póliza de éste la que opere primero". | Felipe Risopatrón García Huidobro, CONOSUR | | | Gardenia Salcedo, CHUBB | | | Andrés Marull, MARINE-RSA | | Sin embargo, como se mencionó, al no ser una obligación legal, no siempre se contratan seguros de este tipo, especialmente cuando se trata de embarques de bajo valor. En este caso, como señala Gardenia Salcedo, Cargo & Specialty Product Line Manager de Chubb de Chile Cía. de Seguros Generales, "hay quienes prefieren optar por cancelar el 2% teórico que exige el Servicio Nacional de Aduanas para el transporte internacional, debido a que no se considera importante el seguro". Además, como agrega la ejecutiva, en lo relativo al tramo nacional, "con respecto a los seguros mínimos con los que éstos deben contar, existen obligaciones que apuntan a los transportistas, a fin de poder operar de acuerdo a la normativa chilena". Una inversión necesaria Los seguros de transporte, también llamados seguros de carga, pueden asegurar mercancías transportadas por vía terrestre, marítima o aérea, cubriendo al consignatario de innumerables peligros por pérdidas o daños, entre los que se encuentran fenómenos naturales, incendios, explosiones, caídas accidentales de bultos al mar, extravío y/o hurto, rotura, contaminación, aplastamiento, manchas, abolladuras, contacto con aceites o grasas, golpes y caídas a tierra, y otros riesgos como guerras, motines y huelgas. En este sentido, atendiendo a la cantidad de accidentes que pueden ocurrir en una operación de comercio exterior, como señala Andrés Marull, Gerente Técnico de Marine, la División de Transporte de Carga de RSA Seguros, "los dueños de la carga no pueden dejar al azar o a los seguros de terceros todo su capital. Entonces, tanto para el transporte de carga nacional como internacional, es necesario contratar este tipo de seguros con el objetivo de salvaguardar los intereses de los clientes". En este sentido, nuestros entrevistados coinciden en que la mayoría de las empresas chilenas vinculadas con el comercio exterior entienden los beneficios de estos servicios, existiendo para Gardenia Salcedo, dos grupos importantes: por una parte, aquellas organizaciones que tienen plena conciencia de sus necesidades de seguros, básicamente empresas de tamaño mediano y grande; y por otra, aquéllas -generalmente empresas pequeñas o importadores ocasionales- que sólo consideran el seguro como un gasto. De hecho, en muchas ocasiones, éste es uno de los ítemes eliminados por los exportadores al momento de rebajar costos, aunque representa menos de un 1% en el costo final del producto o del envío y brinda, tanto al exportador como al importador, la tranquilidad de recuperar la inversión en caso de algún imprevisto. No obstante, en la actualidad el margen de riesgo es muy bajo: las pérdidas de contenedores, en lo que respecta a tráfico marítimo es menor al 1% de los containers transportados por los mares del mundo. Pero, aunque este porcentaje es bajo, los cambios climáticos actuales pueden producir un ascenso en las pérdidas; por esto, siempre es recomendable invertir en este ítem y resguardar tanto el producto como la inversión. Por esta razón, agrega Andrés Marull, "cada día es más normal que las grandes empresas cuenten con departamentos propios para administrar el tema de los seguros o que confíen a corredores o brokers la contratación de pólizas". ¿Cómo elegir la mejor cobertura? Considerando la alta competencia que existe en este campo, al elegir a quién confiar su carga, resulta importante conocer algunos tips para optar por la mejor combinación. Para Gardenia Salcedo, aun cuando la prima constituye el factor más gravitante, es fundamental evaluar otros aspectos, como coberturas y deducibles. Además, para la ejecutiva, también es importante analizar la compañía proveedora del seguro con la que se trabajará, valorando elementos como, por ejemplo, rapidez en la liquidación de siniestros, servicios adicionales y, especialmente, el respaldo financiero que tenga para sustentar y/o respaldar su funcionamiento. Por su parte, Felipe Risopatrón destaca el valor del know how de la compañía aseguradora respecto de la logística del cliente, ya que "para cubrir adecuadamente los riesgos es necesario tomar en cuenta el tipo de mercancías a transportar. En muchos casos, pueden existir coberturas especiales. Por ejemplo, los perecibles tienen cobertura de productos congelados y los líquidos a granel, un condicionado especial". Además, algunas compañías, como es el caso de RSA, ofrecen servicios de análisis de riesgos destinados a disminuir las pérdidas que, como señala Marull, "agregan mucho valor y son una gran ayuda para optimizar los servicios logísticos del cliente". Asegurando el mejor servicio Al igual que en otros rubros, la tendencia que actualmente impera en Seguros de Transporte apunta a la especialización por segmentos y/o tipos de productos. Como señala Gardenia Salcedo, existen seguros cuyas coberturas están diseñadas para cargas especiales o segmentos de negocios particulares. En este sentido, además del rubro, también se segmenta por tamaño de empresa, ofreciendo productos especiales para Pymes o para grandes empresas que van desde herramientas online -como es el caso de iCargo de Marine-RSA para cotizar y emitir pólizas en línea- hasta productos "a la medida" o coberturas especiales como la denominada "Stock Throughput" que, como explica Felipe Risopatrón, "es una combinación de cobertura de transporte y seguro de incendio y robo para bienes físicos". De este modo, la industria de seguros de transporte espera que éstos dejen de ser considerados como un gasto, sino que sean vistos como una inversión en seguridad que permite garantizar el buen destino de su empresa, sin importar los percances que puede sufrir la carga enviada. |