En la actualidad, una de las principales preocupaciones del mundo logístico radica en aumentar la visibilidad del proceso global, es decir, de la gestión logística (compañía) y, sobre todo, de la cadena de suministro (entre compañías).
En esta búsqueda permanente para obtener una mayor visibilidad, una empresa puede incorporar Tecnología, como por ejemplo sistemas ERP (Enterprise Resource Planning), para mejorar a través de información e integración en línea el rendimiento de la compañía y, entre otros resultados, lograr disminuir los problemas generados por el efecto "Bullwhip".
Inventario por información
Sin embargo, alcanzar una coordinación de buen nivel a lo largo de la cadena de suministro depende de muchos factores distintos, pero es posible lograrlo siguiendo algunos preceptos básicos:
Sustituir inventario por información.
Información de mayor calidad nos lleva a ciclos de tiempo menores.
Información rápida implica mejor capacidad de respuesta.
De ahí, la importancia en mantener al capital humano debidamente capacitado y entrenado en las operaciones básicas, pero especialmente en su relación con la tecnología, que a su vez actúa como el nexo fundamental en la comunicación interna y externa. En resumen, debemos hacer consciente al capital humano de la importancia de su función y la necesidad de conocer y manejar la tecnología disponible dentro de su compañía; hoy no es suficiente con ser un simple usuario tecnológico, sino que cada trabajador necesita entender y gestionar información de calidad a través de la Tecnología.
Hoy en día, las compañías prestan más atención al flujo de la información que al del propio producto, pues se entiende que a mayor nivel de información, menor nivel de existencias. Asimismo, las compañías invierten en una gran variedad de nuevas tecnologías disponibles en el mercado y deben gestionar la diversidad generacional al interior de las compañías.
La Capacitación y el Entrenamiento
Al considerar las variables relacionadas con la Información y Tecnología, generalmente se subordina la capacitación y entrenamiento del capital humano, aunque éste último es el pilar fundamental para desarrollar una verdadera y sólida ventaja competitiva.
Adicionalmente, poco se habla de las diferencias generacionales y del nivel de estudios o preparación que se encuentran al interior de las compañías, siendo en las áreas operativas donde se encuentran la mayor cantidad de diferencias. Además, estas brechas son muy notorias e importantes al momento de conectarlas con la tecnología que se utiliza en los procesos internos (rendimiento y eficiencia).
A raíz de estas diferencias, la organización puede hacer crisis, especialmente al momento de incorporar nuevas tecnologías. Por esta razón, debemos hacernos cargo de la correcta y permanente capacitación que requieren todas las generaciones de trabajadores que se encuentran en estas labores operativas de la bodega.
En ese sentido, el mayor y permanente desafío de una organización logística es saber asegurar una capacitación de calidad que agregue valor a las personas, que incluya en forma permanente y actualizada las variables y tendencias del mercado logístico. Y, para lograr este objetivo, es fundamental desarrollar y potenciar el capital humano considerando para ello todas las variables desarrolladas anteriormente.