Gustavo Pizarro.

¿Cómo trabaja Kimberly Clark en nuestro país?
La empresa tiene más de 30 años de presencia en Chile, y a la fecha, posee oficinas comerciales, ubicadas en la comuna de Huechuraba, una planta productiva en Parque Los Libertadores, Colina; y un centro de distribución en Lampa (Valle Grande). Su modelo de producción es hibrido, con un 50% de producción local y un 50% de productos importados. En Chile se fabrican gran parte de los papeles higiénicos y pañales, y el resto residual de pañales, papeles y productos de categoría femenina y de adulto, se traen desde distintos lugares del mundo (Asia, Latinoamérica, México, USA). Asimismo, se exporta a la Región una pequeña cantidad de productos (fabricados e importados).

Kimberly Clark tiene dos grandes líneas de negocio. La primera tiene cuatro categorías: Infant Care (productos para el cuidado de bebés y niños, entre ellos pañales, toallitas húmedas y ropa interior de transición con marcas como Huggies, PullUps); Femme Care (protección femenina con marcas como Kotex e Intimus); Family Care (papel higiénico, pañuelos desechables, rollos de cocina, Kleenex, Scott); y Adult Care (marcas de cuidado para adultos, como Depend, Poise y Plenitud); y la segunda es Kimberly Clark Profesional, que ofrece soluciones de higiene y limpieza sostenibles para empresas.

¿De qué manera describiría su logística?
Durante los últimos seis años hemos realizado en Kimberly Clark una transformación logística, orientada a simplificar la cadena de suministro. Una de las principales iniciativas para lograr este cometido ha sido la gestión de un trabajo colaborativo permanente con nuestros clientes, que busca eficiencias, a través de acuerdos logísticos y comerciales.

Hoy, tenemos una logística simple, flexible y customizada. En términos de cifras, entre el 80% al 85% de nuestro volumen va centralizado a supermercados y farmacias, desde donde estos retailers se encargan de la distribución hacia sus locales, y un 20% es por atención directa al canal tradicional y e-commerce (ferias libres, mayoristas, minoristas), a quienes distribuimos a través de socios estratégicos.

¿Qué desafíos logísticos han debido enfrentar los productos esenciales en tiempos de pandemia?
Han sido diversos los retos que hemos tenido que sortear durante el último año. El primero que tuvimos que abordar, como proveedores de productos esenciales, fue la alta presencia y fuerte rotación que experimentaron gran parte de los productos que ofrecemos en los diferentes canales de distribución. Esto al mismo tiempo, implicó la disponibilidad de espacios, como por ejemplo, islas en los supermercados y puntos de ventas adicionales, los que tuvimos que atender ágil y rápidamente. Fue un gran desafío, ya que estas locaciones requerían de productos en formatos específicos, con nuevos requisitos y preparaciones.

Otro desafío con el que tuvimos que lidiar, fue el cuello de botella en el comercio internacional, que alargó nuestros ciclos de importación, tanto de insumos como de productos, los que tuvimos que suplir con otros niveles de inventario y con la diversificación de proveedores.

¿Cómo afrontaron la falta de stock con los clientes?
A través de nuestra estrategia logístico-comercial de trabajo colaborativo con nuestros clientes, la que nos ayudó a buscar soluciones eficientes y rápidas. Entre ellas, destacan el reemplazo de productos, por otros similares; la importación de contenedores directamente a los clientes; el desarrollo de nuevos proveedores; y la implementación de tecnología, entre otros. Además, un gran trabajo en equipo y el ser muy flexibles y horizontales, complementó lo anterior.

¿Qué otras acciones han implementado?
Para las labores dentro del centro de distribución (limpieza, maquila, seguridad, etc.), asumimos un proyecto a nivel regional de Facility Management, donde nos aliamos con un partner estratégico, especialista en este tema, para tercerizar estos servicios con una sola contraparte.

Lo mismo hicimos para la última milla. En este aspecto, nos hemos apalancado mucho en lo clientes del canal moderno (retailers, farma y supermercado), ya que ellos se encargan de este proceso, nosotros solo hacemos la reposición. En tanto, en el canal tradicional, el desafío es nuestro, y para afrontarlo, nos conectamos a las plataformas de nuestros Marketplaces, donde el usuario accede a diferentes alternativas de delivery y, para la distribución de los productos adquiridos desde nuestra plataforma web, tenemos una alianza estratégica con un partner, especialista en la distribución de última milla.

¿Con qué infraestructura cuentan para llevar a cabo sus procesos?
La planta de Colina tiene un centro de distribución de 5.000 m2, desde donde distribuimos directamente a una porción de clientes (10%). El resto de los productos que se fabrican en la planta junto a los productos exportados se almacenan en el centro de distribución de Lampa, que tiene 40.000 m2 (25.000 m2 construidos y tiene para almacenar 41.000 posiciones pallets), desde donde se efectúa la distribución a todo Chile (90%). Este centro destaca por contar con altos estándares de calidad, seguridad, y de muy buenas prácticas operacionales, con modelos de mejora continua, sistemas de gestión, y modelo de autogestión. Es uno de los centros de Kimberly Clark más grande de Latinoamérica con un gran flujo de rotación de productos.

¿En qué tecnologías apoyan sus operaciones?
Hemos trabajado fuertemente para convertir este CD en un centro de excelencia, con información estandarizada y en línea para parametrizar y gestionar la operación. Hoy en día trabajamos con plataformas internas que nos suministran toda la información logística que requerimos (visibilidad de la cadena, de los costos-servicios, tránsitos, contenedores, abastecimiento de los productos, cobertura, entre muchos otros). A través del tiempo, hemos ido enriqueciendo este hub de información, con el objetivo de tener estandarización, colaboración y simplificación.

También trabajamos con Power BI, herramienta de análisis inteligente empresarial que permite conectarnos rápidamente a una amplia variedad de orígenes de datos con muy poco esfuerzo, y utilizar esos datos para dirigir la empresa con más eficacia que nunca.

En términos de sustentabilidad, ¿Qué iniciativas han implementado?
Estamos implementando una estrategia de sustentabilidad bastante potente en distintos ámbitos y que se enmarca dentro de la Ley REP (Responsabilidad Extendida del Productor). Entre las principales iniciativas, destacan una serie de alianzas estratégicas con partners, especializados en manejar el reciclaje y la reutilización (economía circular), quienes nos ayudan en este proceso, al mismo tiempo que nos orientan con buenas prácticas y en conjunto, realizamos evaluaciones y métricas de avance.

Por otro lado, para reducir las emisiones de carbono, estamos avanzando en un proyecto para la implementación de vehículos eléctricos. En esta misma línea, aumentamos la cantidad de volumen dentro de los camiones (cantidad de m3 ) con vehículos de cargas de doble piso o montadas (doble pallet) para reducir la cantidad de unidades de transporte que están en la calle.

En términos de iluminación, cambiamos la luminaria tradicional en nuestro CD por iluminación LED, triplicando nuestra luminosidad y reduciendo a un tercio el consumo de energía; y en nuestra planta, implementamos paneles solares. En tanto, en el ámbito de la Responsabilidad Social Empresarial, estamos trabajando fuertemente para ser una empresa inclusiva (en todos los aspectos) y estamos comprometidos con fundaciones y algunas entidades gubernamentales, para la materialización de donaciones y aportes, especialmente de productos esenciales.

¿Cómo describiría el valor de la logística para Kimberly Clark?
Es parte fundamental de la estrategia del negocio. Estamos enfocados en transformar nuestro costo de servir para generar eficiencia y fondos de inversión, para luego reinvertirlos en el consumidor final. Esa es nuestra esencia. Es decir, si podemos eficientar nuestros costos, somos más competitivos y podemos entregar al consumidor final un mejor precio. Esta ecuación de valor nos permite generar un mejor posicionamiento frente a nuestros clientes y competidores, y cumplir con el mayor de nuestros desafíos que es llevar a las personas productos para mejorar su calidad de vida.

¿Qué desafíos tienen pendiente en términos logísticos?
Estamos trabajando en definir cómo atenderemos e implementaremos nuevas tecnologías, como la Inteligencia Artificial. El rápido desarrollo de estas tendencias, nos invitan a movernos rápido en este escenario, y estamos conscientes de los beneficios que proporciona, en términos de productividad. Queremos estar preparados para subirnos al carro de las nuevas tecnologías, siempre de la mano de nuestros clientes, y con el claro objetivo de acercarnos más al consumidor final.