Cada día la tecnología nos sorprende en todo ámbito y la logística no escapa a ello. Últimamente Amazon nos ha impresionado con sus robots, los que manejan a su antojo las estanterías donde están almacenados los productos que los clientes compran, y los llevan a las estaciones de trabajo, donde el usuario/operador de dicha estación los retira (picking). Este proceso se conoce como producto a operador. También existen otros dispositivos que aplican este método como por ejemplo: Shuttle para pallet y caja (tote), carruseles horizontales o verticales, entre otros equipos o sistemas, donde las productividades son realmente increíbles.

Ahora bien, en el otro extremo hay empresas, que tal vez, solo con el uso de Excel cumplen su objetivo logístico y tienen todo bien administrado. Sin embargo, llegará el día en que su actual sistema no entregará los resultados deseados y necesitarán implementar una solución más sofisticada, como un WMS. Esta trae consigo la captura de datos, a través códigos de barras y red Wi-Fi, como mínimo o base.

En esta línea, existen tecnologías que apoyan directamente a los WMS, con la finalidad de aumentar la productividad, como voice picking, pick to light o put to light (operador a producto), además de correas transportadoras de cajas y clasificadores automáticos que clasifican los pedidos según su destino. Todas estas tecnologías son convencionales y se pueden encontrar numerosos casos de éxito, y el proceso de implementación en el orden antes establecido obedecerá a la maduración de la compañía.

Robots Amazon.

Por otra parte existe la tecnología denominada disruptiva, que es aquella realmente innovadora que es capaz que cambiar el cómo se hacían las cosas hasta ahora y dentro de ella podemos destacar:

Análisis predictivo: Extracción de la información para analizar patrones de comportamiento, principalmente de los clientes, y predecir resultados o eventos que se darían en un futuro, analizando la información histórica con la que se cuenta y así poder determinar lo que el cliente desea y, a partir de esto, dise- ñarlo, construirlo y comercializarlo.

IOT (Internet de la Cosas): Permite conectar a través de Internet dispositivos integrados de uso diario, los que envian y recibin datos en tiempo real. Un ejemplo común es monitorear los sensores de temperatura de un ambiente de temperatura controlada y tomar acciones preventivas en caso de algún evento programado.

Dispositivos móviles y wearable: Son equipos "vestibles" y que cumplen la misma función que un dispositivo común, con la diferencia que son más cómodos de usar y producto de ello aumenta la productividad en los procesos. Dentro de esta categoría podemos encontrar ring scanner y gafas inteligentes, entre otros.

Almacenamiento en la nube: Los servidores remotos han ganado terreno en desmedro de los servidores locales, dado su bajo costo y confiabilidad, incluso con mejores prestaciones que un servidor local, lo que ayuda directamente al Big Data.

Shuttle.

Existen otras tecnologías disruptivas como: Machine Learning, Realidad Aumentada, Drones, Inteligencia Artificial, etc.

En resumen, parte de esta tecnología disruptiva revisada anteriormente puede resultar utópica para las empresas. Sin embargo hay algo más importante que la misma tecnología, que es la definición del proceso y luego la incorporación de TI, y no al revés.

Esto es parte de la maduración que se plantea al inicio de este artículo y que no todo el mundo logístico comprende. Hay veces que menos es más, pero no siempre…