En los últimos años, el mercado de camionetas en Chile se ha movido principalmente al ritmo de los requerimientos de la minería, especialmente en lo que tiene que ver con el mundo de los contratistas. Los estándares que demandan estas empresas son, en la mayoría de los casos, los que marcan la tendencia de hacia dónde se moverán los constructores.

“Adicionalmente, se ha incorporado un nuevo segmento de profesionales de diferentes áreas de la ingeniería que han decidido incorporar estas unidades como propias para su utilización diaria”, explica Diego Bozzano, consultor en Logística y Transporte.

Germán Abarzúa, Director Carreras Logística y Comercio Exterior DUOC Sede Plaza Vespucio, enfatiza que Chile es el país de la Región donde más se vende este tipo de unidades en comparación al resto de los segmentos. “Este tipo de vehículo permite un uso tanto familiar como para el trabajo”, asegura.

Manuel Herrera, Jefe Nacional Área Mecánica de AIEP, añade que la necesidad de firmas mineras de movilizar al personal a regiones muy alejadas y de difícil acceso, determinó los estándares. “La fuerte estrategia de la industria automotriz por mostrar sus pick up de gran poderío también determinó que el segmento medio evolucionara. Antiguamente tener una camioneta era un lujo; hoy, gracias a la alta demanda y los bajos costos, este segmento particular ha ido en aumento”, sostiene.

Diego Bozzano, consultor en Logística y Transporte.

Germán Abarzúa, Director Carreras Logística y Comercio Exterior DUOC Sede Plaza Vespucio.

Manuel Herrera, Jefe Nacional Área Mecánica de AIEP.

Principalmente, el aumento de la oferta está dado por una mayor diversificación de marcas chinas e indias, las cuales han ingresado productos con estándares que han ido mejorando con el tiempo. Esta nueva oferta, de mejor precio, compite contra aquellas fabricadas en Sudamérica (Argentina y Brasil), que tienen un mercado objetivo diferente al de nuestro país, por lo que deben ser adaptadas posteriormente para tener un mejor funcionamiento.

Abarzúa afirma que el aumento de clientes particulares que utilizan las camionetas como medio de transporte laboral y familiar es un fenómeno que está recién partiendo y que se podría ver acrecentado con el hecho de que las pick up están exentas de pago de IVA. “En el ámbito logístico, estas cumplen un rol de traslado de personal como del movimiento de mercancías de menores dimensiones”, agrega.

“La demanda está cada vez más enfocada hacia conceptos de seguridad y confort”, sostiene Bozzano. A su vez, Herrera añade que el aumento de empresas contratistas en minería, que necesariamente deben tener una camioneta con estándares establecidos, además la densidad demográfica en grandes urbes, “hace que las personas busquen propiedades de descansos en lugares alejados y en este caso necesiten de un vehículo como este para el transporte”.

En general, afirman los expertos, este tipo de pick up se identifica mayoritariamente por su versatilidad, teniendo la capacidad de ser un muy buen elemento para trabajo urbano, forestal, logístico, industrial o minero.

“Las diferentes presentaciones de cada unidad pueden variar desde sistemas de tracción hasta capacidad de carga, adaptándose a requerimientos de cada usuario. Uno de los principales atractivos de este mercado tiene que ver con la existencia de un mismo modelo en diferentes presentaciones, comenzando con utilitarios y llegando incluso a los de semilujo (sobre USD 50.000), que son utilizados por ejecutivos de alto nivel”, explica Bozzano.

Las camionetas son de cabina simple o doble, dotadas de dos o cuatro puertas y con una caja de carga de hasta 2.000 k. “La diferencia entre un 4x4 y un 4x2 está en la primera tiene tracción absoluta, lo que permite mejor agarre y estabilidad; por su parte el 4x2 es más económico. El chasis y carrocería pertinente estará dado por el uso que se requiere para la camioneta, ya que las dimensiones determinan la capacidad máxima de llenado”, indica Abarzúa.

Herrera añade que la diferencia está en su chasis: “Algunas son como un vehí- culo tipo sedán monocasco, donde todo está soportado por su carrocería, como por ejemplo el motor y la suspensión, y que en su parte trasera tiene un vano para carga liviana (máximo de 750 kg)”.

Para Bozzano, el uso que se le va a dar a la pick up es la variable crítica, comenzando por el tipo de terreno y condición en la que deberá ser utilizada. “Esto definirá en gran medida la tracción necesaria, y cómo se verán afectados los sistemas de suspensión y el chasis. En cuanto a la carga a transportar, esto probablemente ayude a la definición del tipo de cabina, pudiendo ser una doble o una simple, variando, por ende, el tamaño y capacidad de la plataforma de carga”.

En los aspectos de confort del vehículo, estos constituyen un adicional que va en línea con el usuario final de la camioneta: si el dueño del mismo es el usuario final, probablemente requerirá de mayor confort; en cambio, si es utilitario para trabajo, se requerirá un confort de menor nivel.

“Antes de elegir una pick up es necesario saber su tipo de chasis, conocer el nivel de tracción con que viene, si es 4WD o AWD. Por ejemplo, en el primero, uno puede seleccionar el tipo de tracción, en el segundo siempre está la tracción en las 4 ruedas, generando un grado de seguridad extra”, señala Herrera.

Otro punto fundamental es la seguridad; saber bien cuáles son los sistemas que traen los diferentes modelos: ABS, SRS, ESP, etc. El motor es otro punto crucial; uno muy pequeño, limitará en cuanto a la carga versus uno de mayor potencia que genera un margen mayor. El chasis también permite tener un carro de arrastre. “En un monocasco también podemos tener un carro de arrastre, pero obviamente con mucho menos carga”, añade Herrera.

Para Abarzúa también resulta fundamental considerar la tracción de la camioneta: si será 4x4 o 4x2. “Se deben comparar precios y el prestigio de la marca a elegir. Otro aspecto relevante a considerar es el respaldo del servicio técnico detrás del vehículo elegido”, enfatiza.

El servicio postventa juega un rol principal en la definición del producto a utilizar, ya que se requiere que el vehículo no deje de operar durante todo un contrato de servicios. Es importante comprender que la disponibilidad es la condición necesaria para poder tener personal trabajando, cumpliendo funciones o respondiendo ante requerimientos de emergencias o contingencias.

“Las camionetas deben estar disponibles cuando se las requiera, y para eso, tener un servicio postventa basado en mantenimientos rápidos y de costo accesible, es crítico”, señala Bozzano. “El respaldo del concesionario también influye, en cuanto a tener un stock de repuestos suficiente o incluso unidades de respaldo ante fallas no esperadas”.

Los expertos coinciden en que lograr que las camionetas comercializadas en el país estén configuradas a la realidad de su utilización, es algo vital, ya que existen necesidades de trabajo en altura o condiciones de transitabilidad sin caminos que no son similares a otros países de la Región.

“La postventa juega un rol muy importante, ya que muchas pick up son usadas en el comercio, por lo que no pueden estar mucho tiempo en el taller.

Cada concesionario debe estar capacitado para un mantenimiento rápido y de calidad”, explica Herrera. “No obstante, en el uso particular, los vehículos se emplean para salidas fuera a otras regiones del país y, en caso de imprevistos, se debe tener en consideración una cobertura nacional”.

Bozzano concluye señalando que en las condiciones de desarrollo económico y de inversión actuales, las proyecciones de este tipo de vehículos en el país son muy buenas. “Se requerirán más y mejores productos de este tipo para poder prestar servicios de ingeniería, transporte, construcción y tantos otros”.