Rodolfo Torres-Rabello.

En esta edición, quise tomar frases de distintos pensadores, ponerlas en el contexto de Logística y Operaciones, y ver de qué manera pueden ayudar a quienes trabajamos en esta área a entender las causas y efectos de acciones y/o iniciativas.

Tal vez las cosas se hacen porque siempre se han hecho así. O tal vez la agenda está repleta de cosas urgentes. O tal vez aprendimos a convivir con las diferencias de inventario, con los quiebres de stock y con los reclamos de clientes. Y como corremos todo el día, tal vez ustedes piensen que no es el momento de intentar un cambio.

Es tiempo de volver a lo básico. ¿Estamos haciendo las cosas correctas? ¿Estamos haciendo correctamente las cosas? Pero, sobre todo, ¿nos estamos haciendo las preguntas correctas? Tal vez, como dijo alguien, cuando sabíamos todas las respuestas, cambiaron las preguntas.

¿Tenemos problemas crónicos sin resolver? Si imagina la cadena de suministro como una red de cañerías, ¿cuántas goteras caen todos los días sin que nadie haga nada por impedirlas? ¿cuánto impactaría sus KPI si mejora un punto su precisión de pronósticos? ¿Todos los clientes necesitan el mismo nivel de servicio?

“Formula una pregunta impertinente y estarás camino a la respuesta pertinente” (Jacob Bronowsky)

Ha llegado el tiempo de buscar soluciones creativas fuera de la caja. A menudo se abordan los problemas de la forma acostumbrada y naturalmente se obtienen los mismos resultados de siempre. La gente acude a los seminarios para buscar recetas, pero lograr cosas distintas requiere soluciones diferentes: esa es la esencia de la innovación.

La Logística y, en general, las Operaciones son un campo fértil para las innovaciones. Un obstáculo a la innovación es la miopía de los propios paradigmas. Aquel que tuvo un éxito en el pasado seguramente quedó enamorado de esa solución y piensa en repetirla una y otra vez.

Quienes están atrapados en sus propios paradigmas se revelan por sus palabras. Suelen usar frases como “esto ya lo probamos y no resultó”, “nuestro negocio es diferente”, “esto ya lo hice en otra empresa y sé cómo se hacen las cosas”. Las barreras mentales son más poderosas que las de acero y cemento.

Amazon y muchas otras empresas están reinventando las reglas. Ya se entrega en una hora en ciertos lugares y algunos están probando instalar tiendas sin inventarios. La robótica, los vehículos autónomos y la impresión 3D, son solo ejemplos de cómo la Cuarta Revolución Industrial está cambiando la fisonomía de lo que alguna vez fueron las Operaciones tradicionales. Y, a riesgo de ser majadero, quienes no se reinventen serán parte de la historia.

Pero no se trata solo de tecnología: camine los procesos. Converse con las personas. Escuche sus ideas. Pregúnteles. Pregúnteles como mejorar. Se encontrará con sorpresas. El talento de las personas sin aprovechar es también un desperdicio.

“En las empresas siempre hay alguien que sabe lo que ocurre pero nadie lo escucha” (Philip Crosby)

Dicen que un día de sol estaba Newton paseando por el campo. Pasó por allí un pastor con un rebaño de ovejas y, luego de saludarlo, le preguntó si tenía paraguas. Newton le contestó lo más cortésmente posible que no necesitaba paraguas con ese hermoso día soleado. El pastor movió la cabeza y siguió su camino. Al rato comenzó a llover. Empapado, Newton corrió hacia su casa. En el camino, encontró al pastor, guarecido bajo un frondoso árbol. Newton le preguntó cómo supo que iba a llover. “Yo no sé, señor”, dijo el pastor, “son mis ovejas. Se ponen inquietas y refriegan el hocico contra los arbustos...”.

Newton solía decir después en sus clases: “He aprendido mucho con un paseo en el campo. La única verdad indiscutible es que no todo es mentira. Y esta verdad puede ser uno de los principales impulsos de la curiosidad de los sabios”. Aprendamos de Newton.

Porque estamos viviendo en un cambio de época aprendamos a entender qué quieren decir las ovejas refregándose en los arbustos, los clientes que dejan de comprarnos, los empleados que cometen errores, las máquinas que fallan y, en fin, las cosas que no resultan como antes. Lo que estamos seguros es que las viejas soluciones pronto, muy pronto, ya no serán eficaces.