PACKAGING PARA EL AGRO Empaques orientados al consumidor Fruit Logística 2016, Berlín. Cada día más, el packaging añade valor a los productos del agro. En volumen, el sector debiera experimentar un crecimiento sostenido de 1,6% anual en la próxima década, como resultado del aumento de la población y el incremento de ingresos, de acuerdo a cifras de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa). A este escenario, se suman la tendencia de mejor calidad de alimentación y nichos como productos orgánicos. Por ejemplo, según cifras de Odepa, en 2015 las frutas y hortalizas frescas de este tipo alcanzaron las 33.607 toneladas, por US$90,7 millones, es decir, un 45,5% del valor total de las exportaciones de productos agrícolas orgánicos; los envíos de congelados totalizaron 10.094 toneladas por un valor de US$46,4 millones; y los productos secos sumaron 591,6 toneladas, por US$3 millones. Los productos orgánicos elaborados llegaron a 785,8 toneladas (US$ 11,8 millones). Las bolsas con asas son un ejemplo de pouches/bolsitas, pre pesadas y re-cerrables, destinadas a tomar y llevar. Por su proceso de llenado y materiales, extienden la vida útil del producto, al mismo tiempo que otorgan mayor funcionalidad. www.friedas.com Además, se prevé una mayor diversificación en la demanda de frutas y hortalizas frescas, fibras vegetales, productos naturales y procesados finos y diversificados y un incremento de alimentos procesados con alto valor agregado, lo cual impone mayores retos técnicos a los procesos de envasado, particularmente primario, y a las cadenas de frío durante la distribución y transporte. Considerando solo la cadena local, la producción frutícola cubre 2.800 km de distancia con unos 7.800 productores, mientras que, en forma paralela, 750 empresas exportadoras llegan a mercados regionales y Asia, según Asoex y Fedefruta (Nº1). El diseño externo de este bag-in-box de cartón busca optimizar transporte y almacenamiento, mientras simplifica la manipulación de la cerveza, eliminando el barril. Diseño de Tom Hussey, Australia. theawesomer.com/kegless-beer-packaging A las demandas por mayor calidad de materiales, menores gramajes y mayor sostenibilidad en las cadenas de uso y descarte tanto para los envases primarios, como secundarios y empaques terciarios, se suman diseños más inteligentes y activos que prolongan la vida de los productos, al mismo tiempo que entregan mayor información al consumidor final. La tendencia de consumo exige, sin duda, más propuestas de packaging dirigido al punto de venta final con mayores promesas de funcionalidad, y muchos productores han integrado estos conceptos en origen, incrementando el valor del producto. Ello implica aspectos técnicos en la cadena de llenado, distribución y transporte y gestión, para alcanzar un equilibrio en inversiones y costos en insumos y logística. Innovación y reducción de costos Una línea de desarrollo creciente de envases primarios son los formatos más pequeños con packaging multi-componente y estructuras de film que pueden acomodar una variedad de productos frescos. Estas innovaciones dejan atrás la idea de reducir costos en estos componentes y, en cambio, promueven invertir más en tecnologías emergentes. En este sentido, pueden costar más, pero generan reducciones de costos en distintas partes de la cadena. Por ejemplo, envases primarios (vacíos) pueden transportarse apilados o en bobinas consiguiendo mayor rendimiento; o el desarrollo de laminados ayudar a evitar mermas en máquina. También, el incremento de material o proceso en un nivel de envasado puede reducir costos en otro nivel. O la innovación puede producirse a nivel de procesos y rendimiento de llenado, con reducción en la cadena de transporte, como es el clásico caso de los envases Tetra Pak para jugos, lácteos y vino. No obstante, frecuentemente, estos desarrollos no son percibidos por el consumidor, excepto al conseguir una mejor calidad de producto o mayor funcionalidad. Fruit Logística 2016, Berlín. Materiales para protección de frutas y hortalizas a granel. Fruit Logística 2016, Berlín. Envasado orientado al consumidor final incluye verduras limpias y listas para servir. (1) Según datos de Asoex, en 2015 Chile exportó poco más de 2 millones de toneladas de frutas frescas a diferentes destinos. Por María Loreto Valdés Arrieta, Diseñadora, Miembro IPPO (International Packaging Press Organization). loretovalde@gmail.com |