Juan Pablo Matte.

¿Cuáles son las complejidades de la Logística del agro?
A diferencia de otros países, las cadenas de suministro en Chile comienzan con dos grandes desafíos adicionales: la geografía y la ubicación de nuestro país. En una primera instancia, está el traslado de las mercancías de los diferentes puntos de producción hacia las zonas de embarque (marítima o aérea) para luego ser transportadas a sus destinos finales, los que por nuestra posición se encuentran bastante alejados. Por estas razones, nos costó mucho estructurar una cadena logística competitiva, capaz de llegar en tiempo y forma con productos perecibles a los nuevos mercados.

A su juicio, ¿cómo está el nivel de Chile en este aspecto?
En general, Chile lo ha hecho razonablemente bien. Hemos logrado ser competitivos, a pesar de los costos de distribución. Sin embargo, hay que recordar que para desarrollar la cadena logística y resolver cómo complementar el mundo de las importaciones con el de las exportaciones, fue necesario partir por mejorar nuestra infraestructura (vial, portuaria y aérea), y buscar la forma de optimizar las cargas, por ejemplo, aprovechando que los barcos retornen con productos de los países a los que llegamos y viceversa.

En Logística, ¿cuáles son los desafíos que está enfrentando el sector?
El desafío en términos de infraestructura es constante. En este sentido, el mundo rural ha tenido algunos atrasos, ya que aún existen, por ejemplo, caminos interiores o rurales de tierra o puentes inadecuados, que no tienen la capacidad suficiente de ancho o de carga. Hoy estamos viendo esta situación en algunas regiones del sur del país (Araucanía, de los Ríos y de los Lagos), las que se están transformando en zonas que no solo se dedican a cultivos anuales o a la sustitución de importaciones, como en el caso de los granos, sino que han comenzado a incorporarse en el mundo frutícola.

También hay desafíos en la red ferroviaria, el acceso portuario y la mayor instalación de estaciones intermodales y puertos secos.

Otro punto, que hoy es signo de preocupación y que puede afectar la competitividad futura, es la brusca caída que ha tenido el ingreso de camiones nuevos al parque automotor en 2016 y que llegó a un decrecimiento de un 82%, respecto del promedio de los cinco años anteriores.

¿Es la dificultad para precisar los costos logísticos una barrera?
Como industria, tenemos un buen costo logístico para efectos de mantener la competitividad a nivel internacional. Además, el aumento de las Pymes exportadoras en Chile, vino de la mano con el surgimiento de empresas logísticas, que ofrecen soluciones globales y flexibles, lo que ha facilitado las oportunidades de exportar para muchas empresas.

¿Qué medidas ha tomado la SNA para mejorar la Logística?
Nos involucramos de alguna manera u otra, con mayor o menor profundidad. Tenemos buenos contactos con los distintos gremios que están relacionados con la cadena logística. Por ejemplo, para evitar problemas debido a los paros portuarios, estuvimos trabajando en una legislación en relación a los productos perecibles, que obliga a empresas (públicas o privadas) a entregar un servicio mínimo. También hemos tenido conversaciones con el Ministerio de Obras Públicas por el tema de los caminos rurales.