El Paso Los Libertadores atiende un flujo de carga anual de 4,3 millones de toneladas y es la principal conexión terrestre entre Chile y el Mercosur. La situación que se genera producto del cierre de este paso atenta directamente contra la competitividad de nuestro país y su tránsito acelerado hacia el desarrollo, ya que corta la cadena de abastecimiento y le pone un grado de incertidumbre que es difícil de manejar.
Lo anterior también genera inevitablemente un encarecimiento en los costos del transporte, afectando finalmente a los consumidores, quienes deben pagar más caro por los productos importados de Argentina y Brasil o por los productos que usan materias primas de estos orígenes.
El Presidente de la República anunció hace algunas semanas un paquete de 50 medidas para mejorar la competitividad de Chile, algunas de ellas dedicadas al Transporte y Logística, y creo que muchas de ellas apuntan en la dirección correcta.
Estas medidas proponen en el área Logística levantar la restricción legal que prohíbe el cabotaje marítimo y aéreo a vehículos extranjeros de pasajeros y cargas, asumiendo que actualmente estas tarifas son caras y abultan los costos de operaciones, buscando con esto una mayor competencia en este mercado y crear así oportunidades para menores tarifas. En la misma línea, se rebajarán de manera gradual las tarifas por faros y balizas que cobra la autoridad marítima a la marina mercante.
Se contempla también la generación de una red de 700 kilómetros de caminos y la revisión de algunas normas técnicas relativas al transporte de carga; entre ellas, por ejemplo, permitir el uso de neumáticos de doble ancho. También se autorizará la operación de transportistas multimodales de carga, se permitirá la instalación de almacenes extra portuarios fuera de las zonas jurisdiccionales de aduana (para reducir los costos logísticos y descongestionar carreteras) y se fomentará la eficiencia de los trámites aduaneros autorizando la operación de intermediarios de carga.
Si a estas medidas se le agregaran acciones que solucionen el problema puntual del cierre del Paso Los Libertadores, la agenda sería aún más efectiva.
En este sentido, en febrero de este año el Gobierno anunció la licitación para la construcción de un nuevo complejo fronterizo en Los Libertadores. Otros actores proponen el corredor Bioceánico Las Leñas y el Paso Las Damas, ambos en la Sexta Región, o la construcción de un túnel de baja altura como complemento del Paso Los Libertadores. Todas estas medidas, sin duda, serían un gran progreso para resolver el problema actual.
Para avanzar en competitividad y ser efectivamente la puerta de entrada a Sudamérica desde Asia, tenemos que resolver el problema de la conectividad de la zona central con Argentina y el Mercosur vía terrestre. Por ello, esto debe ser un tema fundamental de la agenda modernizadora en el área Logística.