Programa de Gestión de Energía Rubro Transporte
Diagnóstico a tres años de su puesta en marcha | | | | |  | | Claudio Gavilán | ¿De qué manera se aplica el concepto de EE al transporte de carga?
Según diferentes estudios de mercado, hoy día cerca del 40% del gasto operacional de este segmento proviene del consumo de combustible, motivo por el cual la EE para las empresas de transporte significa implementar medidas que ayuden a la reducción de este ítem. Según el “Balance Nacional de Energía”, elaborado en 2011 por el ministerio de la cartera, el 33% de la demanda energética total de Chile proviene del rubro transporte, y dentro de ese punto, a su vez, el 79% corresponde específicamente al transporte terrestre. Es bastante evidente cuál es el área con mayor potencial de ahorro y, en ese sentido, nosotros como agencia lo tenemos bien claro: hay que abarcar temas culturales, tecnológicos y de gestión de energía.
¿Cuál es la tendencia que está imperando a nivel mundial y local? ¿Qué tan avanzado está nuestro país en este tema?
Como agencia estamos trabajando fuerte en tratar de promover el conocimiento y uso de patrones asociados a EE. Por ejemplo, según nuestros estudios, en promedio, por cada tonelada adicional que se carga al camión, el consumo de combustible aumenta en un1%. Recientemente se aprobó la NCh 3331, que establece un protocolo para medir el impacto del uso de tecnologías eficientes en un vehículo, lo cual ayuda mucho. A nivel regional, creo que estamos bastante avanzados, pero si nos comparamos con el resto del globo, vamos un poco retrasados. Por ello, nuestro deber es trabajar con las empresas y apoyarlas.
 El programa de EE está aplicándose desde 2011. ¿Cómo evaluaría la respuesta del mercado y el grado de avance logrado?
La agencia cuenta con un programa de Gestión de Energía, que se lleva a cabo con empresas del rubro, que ya se encuentra en su tercer año de vida. Consta de dos etapas: en la primera se diseña un plan de trabajo y en la segunda se aplican medidas que deben ser cuantificadas. La iniciativa ha ido sumando paulatinamente un mayor número de participantes. Trabajamos con las firmas más grandes del sector y apostamos a que las más pequeñas se vayan adhiriendo poco a poco. Todas las compañías a nivel local han oído hablar del tema de la EE, pero el desafío está en que incorporen este concepto y sus beneficios al interior de su negocio. Incluso, hay tres empresas que están en proceso de certificación de su sistema de gestión de energía a través de la norma ISO 50.001, las primeras en Sudamérica, lo cual constituye un gran avance.
¿Qué ha sido lo más difícil de este proceso?
Las barreras han estado relacionadas con la falta de conocimiento, pero también con la voluntad de las compañías para incorporar este cambio a su organización. Resulta fundamental saber detectar la necesidad, ya que si bien es cierto algunas empresas pueden requerir grandes niveles de inversión a fin de generar ahorros paulatinos, en muchas otras únicamente es necesario implementar un cambio cultural, que además es gratis. Solo implica modificar pequeños y sencillos hábitos de consumo.
 Por otra parte, en los programas de transporte de carga los mayores inconvenientes se encuentran en la escasez de personal que se dedica a esto y el bajo nivel de registro de datos. En ese sentido, la rotación laboral es una gran desventaja.
¿Qué tecnologías se pueden destacar y cómo influye el tema de costos en este ámbito?
Existen una serie de soluciones como aditivos o lubricantes, además de neumáticos de bajo nivel de rodadura y llantas de aluminio, o carros de arrastre más livianos, dispositivos aerodinámicos, motores eficientes y suspensiones. Muchas de estas soluciones no son tecnológicamente innovadoras, pero sí aportan de manera gravitante a la reducción del consumo de combustible. Cabe resaltar que la agencia cofinancia en un 80% (con un tope de $2 millones) la instalación de una serie de dispositivos aerodinámicos para los vehículos de carga con el objeto de promover la utilización de estas tecnologías. En algunos casos, y dependiendo del nivel de las empresas, recomendamos adquirir camiones, sobre todo en firmas que poseen un nivel de conocimiento previo. Para empresas más pequeñas, hay medidas puntuales y más simples.
 ¿Qué han detectado en el tema de la conducción eficiente y las malas prácticas de los conductores?
Primero que nada, que a los choferes no les gusta sentirse controlados. En ese sentido, hay que destacar que nosotros no les enseñamos a manejar; solo les aportamos técnicas eficientes para mejorar su conducción. Aun así, este apoyo es recibido a veces de mala manera. Algunas malas prácticas clásicas son, por ejemplo, bajarse del vehículo y dejarlo encendido. Según estudios, una hora en ralentí lleva a un consumo de entre 2 y 3 litros de combustible. A esto se suma el problema de que muchas empresas no quieren capacitar al conductor, porque hay una alta rotación. Incluso, aplicando ciertas técnicas eficientes de manejo hemos comprobado que el rendimiento del vehículo puede llegar a mejorar en un 13%.
¿Cuáles son los siguientes pasos a seguir en este camino?
Vamos a continuar con el programa de apoyo a las empresas de transporte de carga. Además, estamos relanzando el sitio Web sobre conducción eficiente (www.conduccioneficiente.cl) donde existe capacitación voluntaria con manuales, técnicas y guías, entre otras cosas. Junto a eso, contamos con una serie de programas pequeños y estamos diseñando cursos de capacitación y conducción eficiente dirigidos a monitores e instructores de choferes.
¿Con qué actores han trabajado en este tema?
Colaboramos directamente con empresas de transporte y las asociaciones gremiales como ChileTransporte y CNDC. También tenemos proyectos con instituciones académicas, como la Universidad Andrés Bello, donde probamos nuestras tecnologías. Además, contamos con ciertos fondos destinados a empresas y universidades, y un programa de I+D enfocado al diseño de dispositivos aerodinámicos dentro del mercado local. | |
