Lubricantes y Sustentabilidad en las Operaciones de Transporte | | Por Julio Villalobos Contreras, Director del Centro del Transporte de la Universidad Andrés Bello. | | | | | | Respecto del enorme desafío de hacer más sustentable económica, social y ambientalmente las operaciones de transporte, desde el Centro del Transporte de la Universidad Andrés Bello hemos trabajado por años en dar estructura e investigar en los cuatro ámbitos estratégicos que una gestión ambiental y económicamente eficiente debe abordar. A continuación se presentan estos ámbitos y los principales desafíos -identificados para cada dimensión- que todo gestor de operaciones de transporte debe conocer: 1. Configuración de Flota Mejora en la información y conocimiento técnico para elección de equipos. Incorporación de tecnologías innovadoras y eficientes. Equipos auxiliares, componentes e insumos que aseguren ahorro de combustible. 2. Gestión de Flota Fortalecer análisis cuantitativo, mejora continua de procesos, centrales del transporte en base a indicadores, gestión de proyectos e innovación. Selección, implementación y explotación de sistemas tecnológicos eficientes en operaciones de transporte. Desarrollo de estrategias superiores de Gestión del Mantenimiento. 3. Conducción Eficiente Capacitación continua de conductores en conducción económica y segura. Sistemas y tecnologías de control y seguimiento aplicadas a la gestión de conductores. Fidelización e incentivos a conductores en función de Eficiencia y Seguridad. 4. Optimización Logística Integración operativa y tecnológica del transporte con generadores de carga, puntos de transferencia y de entrega. Mejora de conocimientos de Transporte y Logística de generadores de carga y clientes finales. Investigación coordinada del Estado, Universidades, Gremios, Generadores de Carga y Empresas. Como se puede apreciar, una gestión operativa de excelencia en el transporte supone abordar un amplio espectro de iniciativas y dimensiones de estas operaciones. Dentro de ellas, se destaca la selección y gestión de los lubricantes, un tema aparentemente menor y de impacto relativo, y que generalmente no se encuentra en la agenda de las grandes discusiones respecto de cómo apurar los estándares de eficiencia y sustentabilidad de este sector. El impacto de los lubricantes En términos de eficiencia y sustentabilidad en las operaciones de transporte, los lubricantes tienen básicamente un impacto significativo en tres ámbitos: 1. Cantidad de lubricantes utilizados por Tonelada o Pasajero/Kilómetro recorrido. Para ello, la gestión y seguimiento riguroso de los intervalos de cambio resulta fundamental, en virtud de la tecnología implícita en la configuración de equipos, la naturaleza de la operación y el análisis técnico de estos consumos. 2. La recuperación de los aceites y lubricantes utilizados. Al revisar puntualmente la elaboración de los aceites y lubricantes, se puede notar una amplia gama de contaminantes perjudiciales tanto para el medioambiente como para las personas que son expuestas a estos residuos. Una exposición prolongada en las personas, provocado por gases de los compuestos orgánicos, compuestos aromáticos, metales pesados y otras sustancias presentes, son componentes muy dañinos que con el tiempo pueden provocar problemas respiratorios tales como bronquitis, asma y asfixia hasta efectos cancerígenos y mutagénicos en distintos órganos del cuerpos; todo esto debido a su carácter irritante y tóxico. Adicionalmente, la forma incorrecta de eliminación de los aceites y lubricantes puede provocar daños perjudiciales al medioambiente en tres formas distintas: Si es por medio de la combustión, provoca serios daños de contaminación atmosférica, producido por los gases de combustión tóxicos provenientes de compuestos del cloro, fósforo y azufre. El derrame de aceites en los cursos de agua, puede provocar muerte en diferentes organismos vivos, sean estos plantas o animales. Además, puede inhabilitar fuentes de agua potable, debido a su alto nivel de toxicidad. Los hidrocarburos saturados no biodegradables que componen el aceite usado, en contacto con el suelo destruyen el humus vegetal, y por tanto, la fertilidad del suelo, y generan la contaminación de aguas superficiales y subterráneas. Se estima que 1 litro de aceite usado genera una mancha de 4.000 m² en una superficie de agua; puede contaminar 1.000.000 de litros de agua, y permanece en ella de 10 a 15 años. 3. La selección del tipo de lubricante a utilizar en los equipos que se operan, y en las condiciones determinadas por la operación, particularmente porque se ha demostrado en pruebas (realizadas en Chile y en el extranjero), que los impactos sobre el consumo de combustible de lubricantes de baja viscosidad o resistencia, además de las líneas verdes o eficientes, impactan positivamente en el rendimiento de los equipos, es decir, se verifican ahorros en el consumo de combustible. Lo anterior impacta directamente en la rentabilidad y nivel de emisiones de contaminantes y gases de efecto invernadero de las operaciones de transporte. El aporte de una gestión integral de los Aceites y Lubricantes, a través de un mayor conocimiento técnico y capacidad profesional enfocado a esta dimensión en las organizaciones de transporte, que tenga como objetivo avanzar hacia una operación de transporte eficiente y sustentable, supone trabajar sobre dos de los cuatro ámbitos mencionados para la Eficiencia del Transporte: Configuración de Flota y Gestión de Flota, en este último caso en cuanto a la Gestión del Mantenimiento. En este sentido, los impactos sobre la estructura de costos y sobre las externalidades ambientales de las operaciones de transporte de la gestión de Aceites y Lubricantes es significativa, y nos muestra que aquellas organizaciones que sean capaces de mejorar sus estándares en este aspecto, serán capaces de mejorar su posición competitiva y contribuir a la sustentabilidad de sus negocios y de los de sus clientes. | |