En primer lugar, hay que tener en cuenta algunas consideraciones a la hora de determinar la altura y peso de la carga paletizada, como por ejemplo, un contenedor de 40 pies tiene capacidad para transportar internamente un total de 23 pallets europeos (de 120 x 80 cm) o 20 pallets americanos (120 x 100 cm), aprovechando su superficie en un 80% y 87%, respectivamente.

Asimismo, algunos productos pueden constituir cargas demasiado pesadas para grúas horquillas pequeñas, por lo que conviene limitar el peso, reduciendo el número de pilas o la altura de la carga paletizada. Del mismo modo, algunas estanterías de almacenamiento admiten una carga por m² reducida, por lo que también conviene limitar el peso de la carga. Por otra parte, algunas bodegas están equipadas con ascensores o montacargas de altura reducida y que no pueden admitir cargas a plena altura.

De igual modo, se debe prestar atención al sentido de los patines cuando la carga se introduce con holgura, respecto al pallet. La carga del pallet, no puede hacerse más que por 2 entradas a causa de la longitud de las horquillas o la estabilidad en la manipulación. Una mala elección del sentido obliga a almacenar sobre 2 pilas, lo que provoca una pérdida de espacio de almacenamiento.

La altura de los camiones se sitúa habitualmente entre 2,5 y 2,6 mt y hay que prever alrededor de 15 cm de margen para poder elevar la carga al interior del camión, lo que deja una altura útil disponible de alrededor de 2,4 mt. Hay que prestar atención a determinados casos especiales, como los viejos remolques con altura máxima alrededor de 2,35 mt, los camiones frigoríficos (en los que a veces las mangas de ventilación limitan en 2 mt) y los contenedores marítimos.

La altura accesible para que las personas puedan coger los embalajes que están en lo alto de la carga paletizada no debe ser superior a 1,8 a 1,9 mt, por lo que se recomienda transportar 2 pallets de 1,2 mt superpuestos, en vez de uno solo de 1,8 mt. Así, la tasa de relleno del camión es mejor a pesar de las manipulaciones y los costos de paletización suplementarios. Además, las instalaciones de almacenamiento de muchos distribuidores están equipadas con estanterías paletizadoras que limitan la altura a un máximo de 1,2 ó 1,35 mt.

Una carga que exceda las capacidades del pallet exigirá igualmente una mayor resistencia al apilamiento del embalaje, pues sólo una parte de las aristas externas contribuirá al esfuerzo de resistencia. Además, sufrirá directamente los choques y las fricciones que se produzcan en el proceso. Todo embalaje mal superpuesto o inútilmente cruzado, verá también aumentada su necesidad de resistencia al apilamiento en proporción inversa al perímetro portante que queda para soportar la masa que recibe.


Consecuencia de un mal paletizado

La principal consecuencia de un mal posicionamiento de los embalajes es la necesidad de sobredimensionar la resistencia del embalaje, lo que supone una pérdida económica, y a la que se puede añadir el riesgo de litigios en el transporte.

De igual modo, se debe evitar que la carga sobresalga del pallet, pues se expone al punzonamiento de las capas inferiores, lo que implica una menor resistencia al apilamiento. Asimismo, una carga demasiado introducida en el pallet provoca vacío entre las cargas que se escoran y se degradan. Se deben cruzar las camadas, sobre todo las superiores. De lo contrario, se produce inestabilidad de la carga que se abre en lo alto y se deben superponer las cajas sobre sus aristas para optimizar la carga.