¿Cómo siente que ha evolucionado este año el mercado logístico en Chile?
En términos de volumen de negocios, la tendencia sigue orientada hacia una creciente tercerización de servicios logísticos y, de no mediar alguna circunstancia externa importante, el outsourcing debería seguir creciendo en los próximos años.

El nicho de los Operadores Logísticos (OL) está creciendo a tasas bastante importantes en términos de metros cuadrados construidos. De hecho, durante este año hemos visto hitos en este sentido, como el Centro de Distribución de Trilogic (ahora Loginsa), que viene a confirmar esta tendencia de una mayor superficie destinada a vender servicios logísticos.

En este sentido, ¿de qué forma podría afectar la Ley de Sub-contratación?
Hay que estar muy atento en el sentido de cómo va a influir e impactar esta ley en el negocio de la logística propiamente tal. La subcontratación de servicios logísticos ofrece la ventaja de que una serie de responsabilidades se delegan, entre ellas responder legalmente por un grupo de trabajadores, los que generalmente no son pocos, ya que es un negocio que utiliza intensivamente mano de obra.

Por otra parte, estamos hablando de una situación que no se puede soslayar, ya que hay que ajustarse estrictamente a lo que dice la ley, por lo que los OP que utilizan mano de obra externa deberán poner mucha atención en el grado de solvencia y capacidad que poseen estas empresas proveedoras.

Este desarrollo logístico considerado en volúmenes de negocio, ¿va de la mano de un desarrollo tecnológico?
No necesariamente. Los OL formales se han adelantado a esta tendencia, utilizando sistemas de gestión, como los WMS, o tecnologías de administración de los procesos logís-ticos básicos (radiofrecuencia, código de barras, etc.). Quizás el ámbito de desarrollo logístico que ha estado más retardado es el que se refiere a la especialización y capacitación de los profesionales y técnicos. Lo extraño es que el transporte y la logística son servicios y éstos no los realizan las tecnologías, sino las personas. Sin embargo, hay algunas empresas que están realizando programas de capacitación permanentes para sus trabajadores, entendiendo la capacitación como una genuina fuente de ventaja competitiva.

Pero, ¿los elementos tecnológicos están a la mano de los usuarios?
No creo que la industria logística en Chile esté tecnológicamente atrasada. Hoy en día, entre las industrias que realizan una logística profesional, con un mix entre infraestructura, procesos, tecnologías y recursos humanos, no se aprecian grandes diferencias entre los servicios ofertados por un operador world class. La gran diferenciación se da en el grado de eficiencia en la ejecución, el que siempre será posible mejorar en la medida de lograr una mayor integración, lo que nuevamente nos lleva al tema de la formación, ya que es difícil integrar empresas y clientes si la gente que ejecuta los procesos -como supervisores u operarios- no depuran sus conocimientos en pos de un mejor servicio.

¿Cree que las fusiones podrían ser una tendencia que comience a imperar en la industria logística en Chile?
Creo que sí, ya que es una tendencia que va de la mano con las características del mercado chileno, el que es muy pequeño. En el mercado del transporte en particular existe una gran asimetría en las operaciones y gestión entre un actor y otro, lo que de seguro conducirá a una concentración en el rubro, siguiendo tendencias de mercados más desarrollados como el caso de España.

¿Evolucionará, entonces, la oferta de los transportistas?
Efectivamente, los próximos competidores para los actuales OL vendrán desde el mundo del transporte, a quienes sus propios clientes les exigirán una mayor participación en sus procesos. Hoy en día algunas empresas de transportes ya tienen su división de logística, como Pullman, incrementando su oferta de servicios hacia elementos como la preparación de pedidos, picking, etc.

En el tema del desarrollo logístico país, ¿cree que falta una mayor sinergia entre el mundo público y privado?
En Chile no existe un ente público en el que especialistas puedan conocer y administrar este tema. Por ejemplo, uno se puede preguntar dónde hacemos caber principalmente a la logística. ¿En el Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones? ¿de Obras Públicas? Aquí hay un rol importante que recae en las asociaciones gremiales como Alog y Aprolog, quienes debemos levantar mesas de trabajo con propuestas reales y crear la conciencia de que debemos ser un país de servicios. Cuando hablamos de los corredores continentales o bioceánicos colocamos a Chile como plataforma logística, un centro de transferencia de carga, pero para que efectivamente así sea los participantes de la industria (asociaciones, centros de formación, medios especializados, etc.) deben generar propuestas de trabajo que vayan en esa línea.